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Hay pocos temas tan técnicos pero tan relevantes como el lavado de dinero en materia de seguridad. Actividades como esta parecen alejadas de nuestra vida diaria, al grado que los referentes cotidianos son películas o casos emblemáticos como el decomiso de más de 200 millones de dólares al empresario Zhen Li Ye Gon en 2006 en una mansión de la Ciudad de México o los escándalos internacionales vinculados con HSBC. Sin embargo, a veces puede estar tan cerca de nosotros cuando la persona a nuestro lado apuesta miles de pesos de procedencia ilícita en una terminal dentro de un centro de apuestas deportivas o en un casino y con un poco de suerte o astucia logra triplicar lo invertido y de paso, volver lícitos los recursos.
¿Quién participa en el lavado de dinero? ¿Cómo colocar fondos en el sistema financiero sin que parezca sospechoso? ¿Cuántas transacciones hay que realizar para encubrir la procedencia ilícita de los recursos? ¿Cómo allegarse nuevamente de los recursos inicialmente colocados para comprar bienes y servicios? Preguntas tan básicas como estas abren abanicos amplísimos de posibilidades que requieren una perspectiva caso a caso para entender cómo funciona y evoluciona esta actividad.
Operadores financieros de organizaciones criminales, políticos y empresarios corruptos así como personas oportunistas que deliberadamente incendian sus casas o empresas para exigir pagos a las aseguradoras pueden lavar dinero. Tanto casas de cambio diminutas en ciudades fronterizas como instituciones de banca múltiple de renombre internacional se utilizan para colocar fondos y encubrir transacciones.
Elementos esenciales
Pero volviendo a lo básico, el lavado de dinero es una de las actividades ilícitas de la era moderna. Gran parte de la literatura sobre el tema inició en la década de los setenta y el interés público creció a partir del tráfico de drogas y las políticas prohibicionistas auspiciadas por el gobierno estadunidense.
De acuerdo con la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC por sus siglas en inglés) define dicho fenómeno como “el proceso que disfraza las ganancias ilegales sin comprometer a los delincuentes que desean beneficiarse de los ingresos[1]”. (2017).
Por otro lado, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) lo define como “el proceso a través del cual es encubierto el origen de los fondos generados mediante el ejercicio de algunas actividades[2]”. De acuerdo también con la CNBV el objetivo principal de dicho proceso es “hacer que los fondos o activos obtenidos a través de actividades ilícitas aparezcan como el fruto de actividades legítimas y circulen sin problema en el sistema financiero[3].”
Antes de describir el ciclo tradicional del lavado de dinero, es importante pensar en el dinero desde una perspectiva más amplia pues normalmente se asocia exclusivamente con el efectivo. Bajo esta perspectiva, recordemos que todo aquello que sea medio de cambio, depósito de valor y unidad de cuenta puede ser utilizado como dinero. Los ejemplos convencionales de dinero diferente del efectivo son bonos u otros activos financieros que prometen un pago en el futuro. Otros ejemplos menos convencionales son tarjetas pre pagadas de regalo, criptomonedas e incluso herramientas industriales hechas de oro macizo.
La literatura clásica sobre lavado de dinero reconoce la existencia de un ciclo que se compone de tres etapas: colocación, estratificación e integración. Durante la etapa de colocación se introducen los recursos provenientes de alguna actividad ilícita al sistema financiero. Una vez que los recursos ya están dentro del sistema, se realizan múltiples transacciones financieras para prevenir que se detecte la primera operación o bien para que el rastreo de los recursos sea más difícil. Por último, en la etapa de integración se busca reinsertar los recursos a la economía de forma tal que parezca una transacción legal.
Algunos ejemplos de actividades que se realizan durante la etapa de colocación son depósitos bancarios a través de prestanombres o la introducción de apuestas en un casino. Ejemplos de estratificación pueden ser transferencias bancarias nacionales e internacionales, préstamos a particulares o personas morales o la simulación del pago de facturas entre empresas[4]. Por último, tenemos los ejemplos de la etapa de integración, los cuales pueden ser la compra de bienes raíces, bienes de lujo, inversiones financieras, comerciales e industriales.
Las motivaciones detrás del lavado de dinero son numerosas. Ya sea que se busque esconder actividades ilícitas como narcotráfico, fraudes y sobornos o que se trate de disminuir el uso de efectivo para efectuar compras de gran magnitud, o que se utilice para financiar campañas políticas, o que sirva para evitar o posponer el pago de deudas derivadas de procesos de bancarrota, divorcios o demandas, debe persistir un vínculo indirecto entre el origen de los recursos y el dueño o los dueños de estos.
La industria de las apuestas
Esta industria consta de múltiples ramas como casinos, loterías, apuestas en línea, apuestas de caballos o galgos e incluso los famosos raspaditos. Sin duda, los casinos constituyen el grueso de los establecimientos legalmente constituidos. De acuerdo con el portal Statista[5] los casinos generaron una ganancia bruta de 450 mil millones de dólares en 2016 en tanto que para los casinos online se proyectaba un crecimiento de 3.4 billones de dólares en 2015 dada la tendencia actual de la red.
La industria en México continúa desarrollándose pese a que no es reciente. De acuerdo con un reporte de la consultora PWC[6], los eventos adversos y algunos reveses económicos impidieron que la industria del juego continuara su crecimiento, ya que entre 2007 y 2008, el sector tuvo una tasa de crecimiento de 52.1% y 40%. Sin embargo, la industria reportó un decrecimiento del 7.8% en 2011 y se ha recuperado a un ritmo bajo desde aquel año. Por otro lado, para el 2015 se pronosticaba que nuestro país alcanzará 743 millones de dólares en ingresos, lo que representaba un crecimiento cercano al 6%.
La naturaleza de esta industria no está exenta de controversias desde el punto de vista moral, legal e institucional. Algunos sectores de la sociedad preferirían que esta industria estuviera prohibida por alentar vicios y por no ser socialmente útil o benéfica. Por otro lado, si se aplica regulación excesiva a la industria puede generar desde efectos anti competitivos hasta la aparición de una industria de apuestas al margen de la ley. Asimismo, se requiere un marco institucional sólido que delimite las funciones de monitoreo y supervisión, cumplimiento de normas y acciones preventivas ante el riesgo de lavado de dinero y otras prácticas ilícitas.
En este sentido, resulta importante mencionar cuáles son las instituciones que rigen a la industria en México. En primer lugar, se encuentra el Instituto Nacional de Juegos y Sorteo que funge como responsable de regular la industria. Dicha autoridad se encarga de brindar las licencias, así como de asegurar el cumplimiento de Ley de Juegos y Sorteos que data de 1947. Además, la Secretaría de Gobernación se encarga de controlar la apertura y clausura de los casinos y establecimientos de apuestas, entre otras funciones.
Otras instituciones relacionadas con la industria son la Secretaría de Hacienda y Crédito Público a través del Servicio de Administración Tributaria para fines de impuestos y la Unidad de Inteligencia Financiera. La participación de esta última institución se debe a la Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita. Lo crucial del marco legal e institucional de la industria es que permita el desarrollo de la industria sin cargas regulatorias excesivas y que las autoridades tengan suficiente capacidad para dar cumplimiento a las leyes vigentes.
El lavado de dinero en las apuestas
De acuerdo con Granados (2017)[7] “los centros que controlan los juegos y sorteos con apuestas son, por la naturaleza de las actividades que desarrollan y las utilidades que generan, susceptibles de diversas actividades ilícitas (evasión fiscal, competencia desleal, crimen organizado, etcétera). Sin embargo, uno de los mayores problemas a que se enfrenta el sector de juegos y sorteos con apuestas es el lavado de dinero de procedencia ilícita”.
Según el Grupo de Acción Financiera contra el Blanqueo de Capitales[8] (GAFI o FATF por sus siglas en inglés) existen diversas técnicas que se utilizan para lavar dinero en esta industria. A continuación destacamos algunas de estas:
- Se compran fichas con dinero en efectivo o a través de cuentas en línea del casino, luego se canjea su valor por medio de un cheque de casino o mediante una transferencia.
- Se compran fichas de casinos a apostadores limpios a un precio más elevado y después se cambian por efectivo.
- Combinar ganancias y efectivo en cheques o documentos del casino.
- Utilizar fichas de casino como método de transacciones ilegales.
- Comprar un gran número de certificados de regalo del casino.
- Comprar tarjetas de recompensas de casinos.
Cabe destacar que algunos de los esquemas mencionados requieren la complicidad de los empleados o la falsificación de documentación que acredite la identidad de los usuarios.
De acuerdo con Romo[9] (sf) el lavado de dinero en esta industria resulta importante por tres razones. En primer lugar, solo el 30% del mercado de las apuestas es legal. En segundo lugar, dentro de la industria no existe seguridad jurídica para un desempeño eficaz de los permisionarios. Por último, refiere que la magnitud del lavado de dinero asciende a 25 mil millones de dólares al año en el país.
¿Anonimato para las apuestas o para la ilegalidad?
Existen ciertas situaciones dentro de las apuestas que son difíciles regular. Una de ellas es el anonimato de quien apuesta y de quien cobra el premio. Mantener el anonimato no resulta tan complejo ya que uno puede llegar a un casino o algún centro de apuestas deportivas y colocar una apuesta por cierta cantidad monetaria sin que haya un cuestionamiento sobre la procedencia de los recursos. Además, recordemos que hay diversas alternativas al momento de hacer válido un premio como el uso de un prestanombres.
Lo mismo sucede con las apuestas online. Uno puede adquirir tarjetas de prepago como las Paysafecard e ingresar su valor monetario en los portales online para apostar con total libertad. Existen métodos más complejos para apostar sin revelar la identidad como el uso de direcciones IP diferentes al país de procedencia del apostador o incluso actualmente uno puede apostar vía online en países asiáticos o europeos solo mediante un seudónimo.
Al cobrar un premio, es frecuente que los ganadores de premios cuantiosos soliciten su anonimato por cuestiones de seguridad. Lo anterior es muy comprensible dada la posibilidad de que lo roben, extorsionen o incluso lo secuestren. Sin embargo, al mantener el anonimato no se sabe con certeza si los fondos iniciales provenían de actividades ilícitas. Si los fondos en realidad provienen de actividades ilícitas, no habría forma sencilla de rastrear a quien ingresó dichos recursos.
Por otro lado, también es posible que un prestanombres cobre el premio para después redirigirlo a los dueños originales de los recursos a través de transferencias a múltiples cuentas o en efectivo para que cumpla el ciclo completo del lavado de dinero. En este sentido, debemos recordar que existen muchísimas posibilidades, solo hace falta ser un poco imaginativo.
Para reflexionar…
En este artículo delimitamos los elementos esenciales de esta actividad como su definición, las motivaciones de quienes lo cometen, el ciclo así como diversos ejemplos de actividades durante cada etapa. De igual forma, se particularizó en el desarrollo de la industria de apuestas en términos de la evolución de los ingresos, su carácter controversial así como el marco legal e institucional vigente. Por último, se enlistaron algunas técnicas específicas de lavado de dinero en la industria de las apuestas y cómo el anonimato es un arma de doble filo pues no permite identificar el origen de los recursos, pero protege a los ganadores de premios cuantiosos.
Sin embargo, permanece la duda, ¿por qué es importante prevenir, detectar y sancionar el lavado de dinero? Existe el consenso general de que son acciones deseables para debilitar la estructura de las organizaciones criminales. Constituye un delito del fuero federal perseguido por la Procuraduría General de la República regularmente. Además, instituciones internacionales como el Fondo Monetario Internacional y organizaciones como el GAFI siguen puntualmente este tema. Consideramos que la importancia va más allá de las razones previamente enlistadas. Es más, analizar la industria de las apuestas es tan solo un pretexto para que surjan más y mejores reflexiones al respecto.
Para nosotros, la relevancia consiste en comprender cuáles son las funciones económicas que desempeña el lavado de dinero y sus implicaciones macro. Recuperamos esta idea (ya no tan reciente) de Donato Masciandaro[10], economista italiano, quien señala cómo esta actividad produce para sus usuarios tres funciones cardinales: 1) minimiza los costos de incriminación al transformar el exceso de liquidez y riqueza en poder adquisitivo real, 2) contamina otros sectores legales de la economía a través de reinversiones y 3) aumenta el grado de camuflaje de los actores criminales dentro del sistema económico. Si no le asignamos mayor prioridad a esta clase de actividades, cualquier estrategia de seguridad tendrá un destino seguro: el fracaso.
Manuel Vélez @VelezManuel @ObsNalCiudadano
Coordinador de Estudios Especiales del Observatorio Nacional Ciudadano
David Abonza @David_Abonza
Economista
[1] UNODC (2017). Money-Laundering Cycle. [online] Unodc.org. Disponible en: https://www.unodc.org/unodc/en/money-laundering/laundrycycle.html
[2] CNBV. Lavado de Dinero. México, Gobierno Federal, Vicepresidencia de Supervisión de Procesos Preventivos. Disponible en: https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/71151/VSPP_Lavado_de_Dine...
[3] ibíd
[4] Cabe destacar que entre más complejo sea el entramado de transacciones diseñado para encubrir el origen de los recurso, más difícil es detectar algún esquema de lavado de dinero.
[5] Statista. Casino and Gambling Industry - Statistics & Facts. Disponible en: https://www.statista.com/topics/1053/casinos/
[6] PWC (2015). Global Gaming Industry Regulatory Frameworks. Disponible en: https://www.pwc.com/mx/es/knowledge-center/archivo/2015-03-kc-global-gam...
[7] Ríos, G. (2017). Diagnóstico del marco normativo y tributario de los juegos con apuestas. 1st ed. Ciudad de México: UNAM.
[8] GAFI/FATF. (2009) Vulnerabilities of Casinos and Gaming Sector. Disponible en: http://www.fatf-gafi.org/media/fatf/documents/reports/Vulnerabilities%20...
[9] Romo, J. (sf) El lavado de dinero y su vinculación con actividades de apuestas y juegos de azar en la legislación mexicana. México, UNAM, Instituto de Investigaciones Jurídicas. Disponible en: http://www2.congreso.gob.pe/sicr/cendocbib/con4_uibd.nsf/841D5EF5C441809...$FILE/11.Lavado_Dinero_Y_su_vinculaci%C3%B3n.pdf
[10] Masciandaro, D., Economics of Money Laundering: A Primer. Paolo Baffi Centre Bocconi University Working Paper No. 171. Disponible en: https://ssrn.com/abstract=970184