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Al ser considerada como un evento circunstancial, la muerte de una familia, derivado del enfrentamiento entre personal de la Marina y presuntos integrantes de una organización delictiva, en Nuevo Laredo, Tamaulipas, Anselmo Apodaca Sánchez, coordinador de servicios periciales de la Procuraduría General de la República (PGR), informó que las balas provenían de un helicóptero de la Marina Armada.
Por ello, en un comunicado, la Secretaría de Marina informó que asume la responsabilidad por estas muertes y afirma que iniciará los procedimientos para proporcionar tanto la ayuda, como la reparación integral a los afectados, en cumplimiento a lo establecido por la Ley General de Víctimas.
“En el caso de la camioneta pick up y la camioneta de lujo de los civiles armados del punto 3, al momento del enfrentamiento estuvieron estáticos, por eso es que presentan diferentes trayectorias, el día de hoy sabemos que fueron apoyados en ese lugar por un helicóptero de la Secretaría de Marina, el cual tenía, utilizando el término, haciendo un viraje sobre la zona y de esta manera, al ser agredidos es donde realizan los disparos, por eso es que estamos con mayor seguridad en estos momentos que al momento el inicio de la agresión el vehículo de la familia va pasando de una dirección de oriente a poniente hasta el lugar en donde fue encontrado”, dijo el funcionario de PGR como parte de sus conclusiones.
Apodaca Sánchez aseguró que las acciones no fueron premeditadas en contra de las personas que viajaban en la camioneta, en la que murieron tres menores y una mujer, y quedaron lesionados un adulto y otro menor.
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