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Diez horas después de su muerte en el hospital Coss de la colonia Roma por el ataque a tiros de su ex pareja en la plaza Reforma 222, los familiares de Jessica Selene recogieron su cuerpo en el Instituto de Ciencias Forenses (Incifo). Sus restos fueron velado en la funeraria García con la presencia de su madre, primos y amigos de trabajo.
Para el traslado sus seres queridos contrataron el servicio de la agencia funeraria localizada en Calzada de los Misterios, delegación Gustavo A. Madero; por más de cinco horas los primos y tíos de Selene esperaron a que el cuerpo fuera colocado en la capilla número dos.
Los familiares se reunieron en el patio del velatorio. Una de las tías, María Concepción, dijo a EL UNIVERSAL que la familia Mujica decidió no añadir datos a lo que ya había informado las autoridades y que serán éstas las encargadas de seguir la investigación sobre el feminicidio
Dijo que no comentarían sobre la relación que mantuvo su sobrina con su agresor. Lo que sí es que “la recordaremos bonito”, comentó.
Llegaron coronas de flores blancas para la capilla y el pésame de los compañeros de la tienda Nine West, donde trabajaba Selene.
Este martes en el centro comercial Reforma 222 los alrededores de la zapatería fueron acordonados e incluso hubo un operativo en conjunto de la policía capitalina y del personal de seguridad de la plaza para preservar la escena del crimen.
La tienda donde Selene fue agredida permanecerá cerrada hasta que los peritos indiquen lo contrario, explicó uno de los policías.
Daños colaterales. El feminicidio de Reforma 222 dejó a un niño de tres años en la orfandad, pues la madre murió horas después que ingresó a un hospital y el agresor aún esta con vida bajo resguardo policíaco en el hospital Rubén Leñero; según su expediente se dedicaba al robo con violencia en delegaciones del sur de la Ciudad y ya había estado en tres ocasiones en prisión.
El menor permanecerá bajo la custodia de su abuela materna y por el momento no hay elementos para que el pequeño acuda ante el Ministerio Público, aseguró el procurador capitalino, Edmundo Garrido.
En conferencia de prensa, señaló que la representación social inició la carpeta de investigación por feminicidio, por lo que en caso de sobrevivir y llevar hasta sus últimas consecuencias un juicio oral, el inculpado Alejandro “N”, de 36 años, podría alcanzar 70 años de cárcel.
Señaló que todas las líneas de investigación continúan abiertas en torno a este caso, aunque la más firme es la de una posible venganza por cuestiones pasionales, “el sujeto también se encuentra grave pero estable; iniciamos carpeta de investigación por feminicidio; los antecedentes que tenemos, la testimonial de otra de las dependientas del establecimiento dijo que la agresión fue directa en contra de la víctima.
El feminicida usó un arma calibre .380 la cual ya es analizada por el área de balística para determinar si se encuentra relacionada con alguna otra carpeta de investigación, ya que Alejandro “N” ingresó al Sistema Penitenciario en 2012 y 2015 por robo.
