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El jefe de Gobierno, José Ramón Amieva, afirmó que la muerte del joven de 32 años que viajaba a bordo de un vehículo en la delegación Iztacalco se trata de un homicidio y no de un caso de abuso de autoridad.

“No, eso no fue un abuso de autoridad, fue un homicidio. Este joven fue víctima de homicidio, ya se acreditó y nosotros pusimos a disposición del Ministerio Público a seis elementos de tanto la unidad que conoció de este incidente de manera principal, como las que se sumaron.

“En un tema de intervención pusimos a seis elementos a disposición, a todos ellos se les practicó la prueba de absorción atómica, de rodizonato de sodio, la prueba de Harrison, y esta prueba de absorción atómica determinó de dónde salió la bala que privó de la vida a este joven abogado, y también se determinó que el policía pues había efectuado ese disparo”, indicó el Ejecutivo capitalino.

Agresión. Alejandro Iturbe, de 32 años, quien viajaba junto con su hermana y un amigo de ambos a bordo de un vehículo Honda Fit, falleció a consecuencia de tres disparos de arma larga, la cual disparó un elemento de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP). Esto, luego de que las tres personas a bordo del coche intentaran evadir un retén. En entrevista, el jefe de Gobierno indicó que por el momento la Dirección de Asuntos Internos determinará si se cumplieron o no los protocolos de actuación de la SSP.

“El protocolo de uso de la fuerza tiene que ser una constante; nosotros no podemos emplear o desplegar una fuerza letal, una fuerza que tenga un alcance mortal sobre alguien que no está generando un esquema de peligro, ni hacia los elementos ni hacia las personas o las víctimas, hacia nadie. “Entonces el protocolo de uso de la fuerza, la ley del uso de la fuerza está vigente y lo que se tiene que hacer aquí es su aplicación irrestricta”, enfatizó.

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