La carne es unos de los alimentos más consumidos a nivel mundial y a pesar de los nutrientes que nos aporta se han generado mitos sobre su consumo. De ahí la duda constante sobre ¿debo o no comer carne ?, ¿es bueno o es malo? Y en esta nota te explicamos si la carne de cerdo es la más dañina como se cree.
Es importante saber distinguir los tipos de carnes para entender su clasificación. En el caso de las carnes blancas encontramos de pollo, de pescado y de conejo; mientras que en las carnes rojas encontramos la de vaca, de caballo, de borrego y de cerdo .
En el caso de la carne de puerco se suele creer que provoca enfermedades, entre ellas triquinosis , enfermedad causada por el parásito Trichinella; o la cisticercosis , provocada por el parásito Taenia solium. Aunque también se ha asociado con el desarrollo de cáncer de colon.
De acuerdo con la experta en nutrición Fernanda Alvarado, no toda la carne que consumimos está contaminada con los parásitos. Sin embargo, sí es necesario tener en consideración que puede llegar a estar contaminada cuando los cerdos están en malas condiciones de higiene, o bien, al comer la carne cruda o mal cocida.
La carne de puerco es una rica fuente de vitaminas, minerales, aminoácidos y proteínas; gracias a ellos obtenemos ciertos beneficios como el incremento de la masa muscular.
Así que no, la carne de cerdo no es mala o la peor como se suele creer. Por supuesto, se deben tomar ciertas medidas de prevención como no consumirla diariamente y cuidar si está procesada ya que en estos casos puede causar complicaciones cardiovasculares. Según un estudio hecho por investigadores de Harvard School of Public Health , se incrementa el riesgo de muerte prematura en un 13% con el consumo de la carne no procesada y 20% en procesada.
La carne de borrego es más dañina que la de puerco ya que sus cantidades de grasa son más elevadas. Mientras que la carne de cerdo nos aporta más grasas poliinsaturadas (que ayudan a mantener bajos los niveles de colesterol), la de borrego tiene mayores concentraciones de grasas saturadas que incrementan los niveles de colesterol si su consumo es frecuente. No importa el tipo de carne que se consuma, ninguna es tan mala si se hace con moderación para que aporte todos sus nutrientes, ya que en exceso sí provocaría enfermedades.
La recomendación de la experta en nutrición Fernanda Alvarado es que se consuma carne de cortes magros como el lomo -que aporta menos grasa que el pollo-, el filete, la pierna, la pulpa y el solomillo.