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Dos jóvenes semidesnudos, con el rostro cubierto con cinta de aislar, las manos atadas a la espalda y letreros que los acusaban de ser presuntos ladrones, fueron obligados a caminar por calles del desarrollo urbano Tres Ríos.
El hecho se sumó a otros tres casos similares registrados en los municipios de Culiacán, Elota y Navolato, donde presuntos delincuentes han sido humillados y obligados a deambular por las calles portando cartulinas que los tildan de “rateros”.
La Policía Municipal de Culiacán fue notificada la tarde de ayer que desconocidos bajaron de una camioneta a los dos jóvenes y les pusieron el letrero en su cuerpo: “No volverán a robar”.
Según los testimonios rendidos por transeúntes, los dos jóvenes lograron desatarse y caminaron por el andador Colosio y luego se internaron en la margen izquierda del río Humaya —que cruza la ciudad—, donde pudieron ocultarse entre los árboles.
La Policía Municipal no logró localizarlos pese a que peinó la zona del desarrollo urbano Tres Ríos.
El presidente de la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos (organización no gubernamental), Leonel Aguirre Meza, afirmó que ante estos casos presentados en varios puntos del estado, se tiene que investigar a fondo para conocer su origen.
Recordó que el pasado 11 de octubre, en pleno centro de Navolato, el joven Luis Enrique “N”, atado de las manos y semidesnudo, fue obligado por hombres armados caminar con una pancarta colgada a sus hombros, con el texto de “rata”.
El activista explicó que en ese caso las autoridades policiacas revelaron no tener antecedentes delictivos del joven, quien fue reportado horas antes por su familia como levantado por un grupo armado, en la comunidad del Bolsón.
Recientemente ha habido casos similares en el municipio de Elota y en Culiacán.
