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De pequeño, a Sergio Arau no le importaba la política, él creía que la situación del país era óptima y que no existían problemas de inseguridad o de pobreza. Su percepción cambió en la adolescencia, cuando pasó de vivir en el Pedregal a la colonia Tacubaya, tras el divorcio de sus padres.
Ahí el cantante comenzó a salir a la calle, convivir con otros jóvenes y fue justo cuando llegó a la preparatoria —en pleno movimiento del 68— que su percepción acerca de México cambió. A partir de ahí todo lo que hacía Arau estaba visiblemente empapado de un aire político: su música, sus pinturas, su escritura, todo. Ese interés por ser un artista con una vena política continúa permeando su vida y trabajo.
En 2017 lanzó un proyecto musical llamado Presidente, con el cual se burlaba pero a la vez alzaba la voz acerca de lo que él considera injusto en el país. Incluso pretendía lanzarse como candidato independiente, algo que no logró concretar, porque entre otras cosas, dice, el sistema está hecho para que no haya postulantes independientes.
¿Cuando nace tu alma política?
En mi casa no se hablaba de política, pero cuando tenía 16 años entré a la Prepa 4, en 1968, y ahí sí el mundo se me puso patas para arriba, yo era muy ingenuo, pensaba que el mundo era increíble y que todo estaba padre, pero a raíz del 68 mi vida cambió, ese acontecimiento me marcó, de ser totalmente apolítico me convertí en una persona que se comenzó a preguntar cosas acerca del país.
¿Ha cambiado la forma en que percibes la política en el país de cuando eras joven a ahora?
Tengo la misma posición que desde joven, soy de clara oposición al gobierno y al sistema porque me molesta lo que está pasando. El humor es lo que te da chance de burlarte y decirle a los demás que despierten. Nuestros políticos no han cambiado, aunque gracias al Internet la clase política se ha vuelto más cínica porque ahora nos podemos enterar de manera rápida de todo lo que hacen.
¿Cómo ves el panorama rumbo a las elecciones de este año?
Todo está mal planteado. La votación no es la democracia, la democracia es que alguien en quien tu confías te represente y pelee por tus intereses. El INE tiene una bronca grave, porque de entrada pertenece al gobierno y la reglas están hechas para que los favorezcan. El INE sólo cobra multas a quien se ha robado todo y tiene con qué pagar.
¿Cuál sería la solución?
Debería ser como en el futbol: a la tercera amonestación, fuera, a la tercera multa que los saquen de la partida y la jugada, es decir, que metiste triple de anuncios, que compraste votos, que te pasaste en el presupuesto de campaña, vas para fuera.
El año pasado anunciaste que te aventarías como candidato independiente, ¿qué pasó?
Llegué tarde a la inscripción, mi credencial no estaba vigente y, por lo tanto, no me pude inscribir. La verdad, está bien difícil ser independiente, porque por un lado está difícil conseguir 7 mil 500 firmas diarias por 120 días porque, además, no pueden ser en tu misma ciudad; tienen requisitos muy específicos que lo hace complicado. Al final debes tener un partido detrás o una organización y gente que ande por todos lados trabajando por ti para lograrlo y eso dista mucho de ser independiente.
¿Que opinas de los candidatos independientes?
Primero deberíamos preguntarnos, candidatos independientes ¿de qué?, no me digas que Margarita (Zavala) es independiente teniendo todo el apoyo que tiene. Siento que todo está hecho para que ningún independiente quede, la verdad.
¿Cuál será el desempeño de los independientes en 2018?
Sinceramente creo que van a quedar muy pocos independientes en la lucha, básicamente serán los que ya están gobernando o los que ya están metidos en la política desde hace rato. Independientes del sistema no lo son, al menos no los que van a quedar.
¿Qué opinas del abstencionismo?
El problema es que la gente en México siente que no sirven las elecciones y por eso dice: ‘¿para qué voto?’ Yo muchas veces he promovido no votar, porque, si no votas, muestras tu inconformidad, de lo contrario estás avalando el que se sigan haciendo las cosas así. Si todos los que no creemos en las elecciones no votáramos y fuera una decisión unánime, sería un conteo muy grueso.
¿Hay buenas opciones por quien votar?
Creo que sí hay opciones, pero para mí, PRI, PAN y PRD están totalmente descartados, no hay forma, lo que pasó en las elecciones del Estado de México me parece de las cosas más ridículas, es claro que ya sabemos que tratarán de ganar a como dé lugar, cualquier opción tiene que ser fuera de esos tres partidos y sus paleros.
¿Cuáles son los grandes problemas que el próximo presidente debería atender?
La inseguridad es algo que siempre a todos nos ha preocupado, pero es claro que haya inseguridad, cuando hay más del 70% de la población viviendo en pobreza y de esos hay treinta y tantos en el nivel de pobreza extrema. La solución no es poner más policías, más barrotes o más muros, el problema es que la riqueza está mal repartida. A cualquiera de los candidatos que atienda a ese setenta y tanto por ciento de pobres le van a decir populista, pero ojalá que quedara bien con hechos. Para mí el TLC fue terrible, todas las empresas chiquitas quebraron, siento que hay que retomar los problemas de la calle, el reto es tener un sistema que atienda a la mayoría y no a la minoría.
Para el artista con un discurso político ¿qué tanta libertad existe?
En la mayoría de los casos se vive con poca libertad de expresión, conozco casos de artistas que se han ido del país justo por eso, hay un rango que es aceptable y eso no se debe a que a los políticos les guste o lo acepten, se debe a que el Internet y las redes sociales así lo han permitido, pero aún hay represión.
Te fuiste de México hace 25 años ¿Porqué lo hiciste?
Nunca pensé irme de México, porque todo mi trabajo siempre ha tenido que ver con México, con nuestra cultura, nuestra historia, la verdad es que entre 1988 y 1991 me fue de la chingada, ya no estaba en Botellita de Jerez y estaba dispuesto a irme a España por lo del idioma, a hacer de lo que fuera porque en México me daba pena irme a trabajar de cajero y que me dijeran: ‘eres Sergio Arau’. Tuve la suerte de conocer a Yareli Arizmendi, que hizo Como agua para chocolate, y ella me llevó a Estados Unidos, me fui de mojado cuatro años, es decir era mojado clase turista porque tenía visa pero solo para ir de vacaciones.
¿Cómo ayuda un mexicano a su país fuera de México?
Los mexicanos que viven en Estados Unidos pueden ir a los consulados a sacar su INE y votar, tener una participación muchísimo más fuerte, clara, siempre y cuando se respeten las elecciones. También pueden boicotear al gobierno, simplemente no mandando sus remesas.