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Aun cuando Luis Miguel tenía una agenda de trabajo ardua y por lo regular tenía planeados sus eventos por los siguientes dos años, siempre se daba tiempo para pasarla con sus amigos o dedicárselo a sí mismo, compartió Rosario Valeriano, quien fue su jefa de relaciones públicas durante un sexenio.
“Cuando él ya estuvo con Hugo López se dio tiempo, incluso para tener novia, tomarse vacaciones e irse con sus amigos a lugares como Hawaii. É” y sus amigos se la pasaban de viernes a domingo en el Baby´O, ahí fue donde disfrutó mucho”.
Eso sí, recuerda, era un perfeccionista a la hora de trabajar, por lo cual era exigente con su equipo de producción y sus músicos, porque gusta que todo se vea y se escuche impecablemente, y él pone el ejemplo al estar siempre pulcro y bien vestido en toda ocasión.
“La verdad es muy atento, muy bien educado, respetuoso y extremadamente profesional, los maquillistas me decían: ‘es el tipo perfecto’”.
De 1984 a 1994, Rosario trabajó directamente con El Sol, ya que estuvo en el área de prensa de las disqueras a las que el cantante perteneció, EMI Capitol y Emi Music. Cuando Rosario fue presentada con Luis Miguel para manejarle la prensa, el tema “La incondicional” ya llevaba cerca de 20 semanas en el primer lugar de las listas de popularidad, relata Valeriano.
“El proyecto fue muy ambicioso, se tenía una gran canción y por eso se hizo este video. Me tocó la grabación y fue impresionante, fueron muchas horas, también se trabajó mucho en la post producción y se logró un tema histórico”.
Rosario señaló que durante la grabación en el Heroico Colegio Militar y la Base de Santa Lucía, los cadetes y pilotos lo trataron muy bien, sobre todo porque tuvieron un poco más de convivencia con el cantante, pues tuvo algunos días de entrenamiento para realizar muchas escenas que aparecen, incluso la del corte de cabello.
“No se cortó el cabello, hubo truco, pero como hay una escena donde aparece con la cabeza agachada y se ve que se lo están cortando con una máquina, pues sí lo pensaron”.