Era la crónica de una muerte anunciada. Durante meses el gobierno federal diseñó el golpe a la cabeza de la mafiosa CNTE.
Y la estocada fue tan certera que de un tajo gobiernos estatal y federal decapitaron a la bestia en espera de que el cuerpo termine por morir de inanición.
Y es que un inesperado decreto estatal acabó con el Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO); que en manos de la bestia insaciable pudrió y pervirtió todo el sistema educativo de Oaxaca, junto con los últimos cinco gobiernos estatales.
Y el diseño fue de tal cálculo que coincidió con el tiempo vacacional, lo que tomó desmovilizados a los radicales de la CNTE; lo más atrasado, conservador, reaccionario y mafioso del sindicalismo charro.
Y es que los otrora disidentes que combatían al charrismo del SNTE son de viejos todo aquello que criticaron en sus mocedades. Son la mayor mafia criminal; responsables del mayor crimen y el mayor saqueo a la nación en los últimos 20 años; el crimen de dejar sin educación a millones de niños a los que condenaron a la miseria, atraso y desesperanza, mientras se robaron miles de millones de pesos.
Pero no es tiempo de cantar victoria. ¿Por qué? Porque aún sin cabeza, el cuerpo de la mafiosa CNTE tiene fuerza suficiente para dar la batalla final. Y nadie puede descartar que ante la debilidad del gobierno federal la CNTE sea capaz de regenerar en mil cabezas, como la hidra. Un ejemplo es el SME; cuyo cuerpo no termina por morir, a pesar de que Felipe Calderón cortó la cabeza de la Compañía de Luz y Fuerza.
Y ante esa realidad la gran pregunta no apunta a la fortaleza de la CNTE, sino en dirección a la debilidad del gobierno federal. No es nuevo que el gobierno de Peña Nieto decidió la batalla final contra la bestia de la CNTE, justo en el momento de mayor debilidad institucional. Tampoco es nuevo que la Coordinadora ha ganado algunas batallas decisivas.
En todo caso lo que estamos por ver es si el gobierno de Peña Nieto tiene la fuerza y es capaz de la puntilla para acabar con una de las mayores amenazas a su gobierno y a su reforma social emblema; la reforma educativa. ¿Dudan de la capacidad de reacción de la CNTE?
Si recuerdan, las primeras escaramuzas educativas fueron la reforma constitucional y sus leyes reglamentarias. En esa etapa la primera víctima fue la lideresa vitalicia del SNTE, Elba Esther Gordillo, que sigue en prisión, mientras que la CNTE se empoderó como nunca.
Una vez que el Congreso aprobó la reforma constitucional en materia educativa —en medio de las mayores movilizaciones de la historia de la CNTE—, vino la homologación en los congresos estatales. Ahí se produjeron las primeras victorias de la CNTE y del SNTE. En estados como Oaxaca la reforma no pasó, mientras que en otras entidades la suma de fuerzas de la Coordinadora y del Sindicato simularon la homologación al grado que debió intervenir la Suprema Corte.
Más adelante, a la CNTE le cayó en bandeja de plata el secuestro y crimen de los 43 normalistas y así lograron llevar el chantaje y la presión hasta las elecciones intermedias, en las que amenazaron con boicotear el proceso electoral.
Pero como la impunidad no es para siempre, llegó el cobro de facturas entre el débil gobierno federal y la poderosa mafia de la CNTE; intocable e impune a pesar de que en años recientes cometió toda clase de actos criminales; el más deleznable, dejar sin escuela a millones de niños durante 20 años.
¿Tendrá agallas Peña Nieto para la puntilla a la CNTE? Al tiempo.
Twitter: @ricardoalemanmx
