Han salido a la luz los detalles del mayor robo de identidad en la historia del país y del mayor fraude electoral en la historia de Chiapas. Todo comenzó con la denuncia de dos ciudadanas que no pudieron votar en el proceso electoral celebrado en aquel estado en julio de 2015. Ambas acudieron ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales, FEPADE, y manifestaron su molestia porque no se habían encontrado en el padrón. Descubrieron en cambio que las habían incluido, sin que ellas lo solicitaran, en la lista nominal de residentes en el extranjero correspondiente a Chiapas.

Era el 1 de septiembre de 2015. Varios partidos políticos reportaron la misma anomalía: el caso de ciudadanos que no habían podido participar en el proceso, porque habían sido movidos a la lista de votantes en el extranjero.

Se trataba apenas de la punta del iceberg de un monumental fraude electoral cuyo beneficiario fue el Partido Verde Ecologista de México: el partido del gobernador Manuel Velasco.

Una resolución del Instituto Nacional Electoral, INE, emitida el pasado 19 de febrero, permite conocer paso a paso la historia del fraude. El documento es el relato de una historia de impunidad y escándalo que el pasado viernes provocó la remoción de varios consejeros electorales del estado de Chiapas: algo que por primera vez se da en la historia incipiente de la democracia mexicana.

Tras las repetidas denuncias de ciudadanos que a la hora de emitir su voto no se encontraron en las listas nominales, la Unidad Técnica de lo Contencioso Electoral del INE obtuvo una muestra aleatoria de 200 personas incluidas en la lista de residentes en el extranjero.

Resultó que de aquellas personas, 164 eran chiapanecos que luego declararon no haberse inscrito como votantes fuera del territorio nacional: alguien los había plantado en la lista.

El INE comprobó que, sin que hubieran salido jamás de Chiapas, aquellas personas habían “votado” desde lugares tan diversos como Armenia, Croacia, Eslovaquia, Cabo Verde, Liberia, Suiza, Japón, Colombia, Argentina y sobre todo Estados Unidos (más de mil supuestos sufragios llegaron desde Florida).

Chiapas es una de las entidades que permiten el voto desde el extranjero. En los comicios de julio, además de la elección de diputados y presidentes municipales, se efectuó la del llamado “diputado migrante”: una figura que representa ante el Congreso local a los chiapanecos que residen en el exterior.

Fue en esa elección donde se rasuró la lista local y se infló cínicamente la de votantes en el extranjero. De acuerdo con los conteos, 6 mil 628 residentes fueron a votar en el exterior: 99.77% de esos votos fueron para el partido del gobernador Velasco.

El INE logró comprobar que al menos 337 personas que no aparecían enlistadas en la casilla que en realidad les correspondía, “votaron” con nombre y apellido desde otras ciudades del mundo. Fue una elección “zapato”, como no se había visto —ni siquiera en la época dorada del PRI—.

Según denuncias presentadas ante la FEPADE, una empresa a la que el Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana de Chiapas contrató por adjudicación directa —DSI Elecciones-— falsificó el padrón de votantes y manipuló la elección para favorecer al candidato del PVEM, Roberto Pardo Molina. La empresa desarrolló una plataforma electrónica para la recepción y cómputo de los votos: las denuncias indican que el dueño de DSI Elecciones, Vicente Manzur Salomón Molina, es primo hermano de Roberto Pardo Molina.

Pardo Molina fue desaforado por el Congreso de Chiapas y expulsado del PVEM en diciembre pasado.

El INE determinó que hubo falta de probidad en los consejeros chiapanecos que pasaron por alto el crecimiento atípico del listado de residentes en el extranjero, e incurrieron “en una notoria negligencia, indebido seguimiento, control y vigilancia respecto de la implementación del sistema de voto electrónico”, lo que vulneró los derechos político-electorales de ciudadanos indebidamente registrados en un listado que no les correspondía.

En un hecho hasta ahora inédito, el INE decidió remover a los consejeros Carlos Enrique Domínguez, Ivonne Miroslava Abarca y Margarita Esther López Morales.

No sé si esté de más decir que entre 2009 y 2015 la votación a favor del PVEM en Chiapas aumentó 781%.

@hdemauleon

demauleon@hotmail.com

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