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Fue el Estado el que dejó escapar a Javier Duarte de Ochoa.
Es de lágrimas y risas que el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, haya invocado plazos jurídicos para “poder actuar” en contra de Duarte. Cuando en los tiempos políticos hizo lo que se le dio la gana a favor del veracruzano.
“Apeló” a los tiempos legales mientras “se le peló”.
El miércoles 12 de octubre, a las 7:04 de la mañana, el todavía gobernador Javier Duarte dio la nota en el espacio de Carlos Loret. Anunció que pediría licencia. Los focos rojos de las víctimas y la oposición política se prendieron. “Se va a escapar”, decían algunos. “Arráiguenlo, síganlo”, pedían otros en el PRD. Pero nada.
El Poder Ejecutivo dialogó con el hoy prófugo, el Legislativo miró y el Judicial actuó tarde.
Pedir licencia en ese momento, de esa manera, no fue fortuito. Previo a la entrevista con Loret de Mola, un día antes, de acuerdo con distintos medios, Javier Duarte sostuvo una reunión con el titular de la Segob. No era la primera vez. Pero en esta ocasión, la charla tuvo efectos en acciones concretas.
El resultado lo conocemos: La licencia (que no renuncia) mantuvo a Duarte con fuero. Mientras tanto, la acción del gobierno federal tardaría unos días, horas invaluables para que pudiera huir.
Vale la pena recalcar que detrás de cualquier movimiento que haga el secretario Osorio o la procuradora Arely Gómez, está Presidencia. El gabinete no actúa sin el aval o la orden de Enrique Peña Nieto.
No tengo duda que Duarte caerá. Enfrentará la justicia.
Lo que me pregunto es ¿cuándo? ¿Qué otra cosa negoció con el poder? ¿Quiénes, además de los cómplices inmediatos, permitieron que primero llegara a gobernar y después que lo hiciera con total impunidad? ¿A dónde fueron a parar los miles de millones generados por la riqueza mal habida de Duarte, familiares y prestanombres? ¿Hasta dónde llegan los tentáculos de la corrupción veracruzana? ¿Y la de las otras entidades?
Demasiadas preguntas sin respuesta. Pero se jaló la primera hebra.
Mucho tenemos que agradecer al trabajo periodístico de medios independientes apoyados por la sociedad y por quienes los retoman. En este caso, a la investigación de Arturo Ángel y todo el equipo del portal Animal Político, dirigido por Daniel Moreno.
RAZONES Y PASIONES: Lo ven y no lo creen. El candidato a la Presidencia declaró que esperará a conocer la votación electoral para decir si la acepta o no. ¿Cómo? ¿Si no gana, denunciará fraude? ¿Si no gana, no aceptará el resultado? Están impactados. Basta consultar la prensa de ayer. Su contrincante lo llamó “un peligro”.
Sí, un peligro para EU, dijo Hillary.