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La respuesta simple sería: dejarlo en manos de la justicia. El problema es que en manos de la justicia está y difícilmente sabremos si él está mintiendo groseramente, o pagará la pena del escarnio sólo porque la víctima supone que fue él.
Él es Andoni Echave, un joven conductor del deplorable programa machín de televisión Master Troll, que teatralizaba agresiones callejeras con esperpénticos recursos de baja comicidad. Después del incidente de Andrea, Televisa canceló Master Troll, Andoni se quedó sin trabajo y enfrenta un cargo de agresión sexual.
Ella es Andrea Noel, una joven estadounidense que un día de marzo caminaba por el Parque México de la Condesa y fue víctima de un ataque como sacado de Master Troll. Un joven la alcanzó, le levantó la falda, le bajó los calzones y se fue corriendo. Andrea cayó, se repuso y siguió caminando digna. Obtuvo el video de seguridad de la zona, lo subió a las redes y se hizo viral al instante.
Andrea me aseguró en marzo que sabía quién había sido y lo iba a denunciar. Denunció a Andoni y se fue de México, porque dice que no soportaba el trolleo y algunas amenazas directas. El miércoles se encontraron en el juzgado. Como Andrea informó que no tenía dinero para el avión Nueva York-México-Nueva York, Andoni, mejor dicho, la mamá de Andoni, pagó los 14 mil 900 pesos del vuelo redondo para que asistiera a la audiencia. Está raro, le digo a Andoni. Es que yo solicité el juicio, quiero que quede claro que no soy el del video, que yo no fui, me explica.
Andoni ofrece como pruebas de inocencia un brazo tatuado, su color de piel, complexión, testimonios de que a esa hora él estaba grabando en la colonia Nápoles. Andrea le dijo en el juzgado que nada le costaba reconocer su culpa y que para acabar el pleito quería una disculpa pública y el reembolso de 306 mil pesos por gastos derivados.
—Le dije a Andrea que lamentaba mucho lo que le pasó, pero que no iba a reconocer mi culpa ni a pedirle disculpas por ese hecho triste y lamentable que yo no cometí —insiste Andoni.
—No eres el del video.
—No soy yo, pero ahora somos dos los afectados.
Así es, Andoni. Y es probable que quedes marcado de por vida. No importa que no hayas sido el que le bajó los calzones a Andrea en el Parque México. Ya eres un símbolo de oprobio y más vale que aprendas a vivir con eso. Es el espíritu de los tiempos. En la guerra contra la violencia y el crimen sexual (que suscribo y peleo), los sospechosos también están muertos. Y más luego de Daphne y Los Porkys.
Que tengan al menos el derecho de contar su versión.
MENOS DE 140. Hablando de abusos: deplorables los arranques de Miguel Ángel Yunes. Si eso hace en público…
gomezleyvaciro@gmail.com
