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Es el escándalo de corrupción de moda en América Latina. Y se va a poner peor.
Los directivos de la compañía Odebrecht confesaron ante las autoridades de Estados Unidos sus pecados, buscando clemencia. Y salpicaron a toda la región. Fue un listado de países, funcionarios, legisladores que les sirvieron para expandirse con un éxito inusitado y volverse una constructora multimillonaria en dólares.
Medio Brasil está implicado. Al presidente de Colombia y Premio Nobel de la Paz, Juan Manuel Santos, le llegó la mugre. También al ex mandatario de Perú, Alejandro Toledo.
Cuando se dieron a conocer algunas de las más relevantes confesiones de Odebrecht sobre su poder corruptor, México no iba a quedar a salvo.
Según lo que se divulgó, este consorcio de origen brasileño aceptó haber sobornado con millones de dólares a un funcionario de Petróleos Mexicanos. ¿Quién? Eso no se ha divulgado hasta ahora.
Hace unos días, en la Primera Reunión Plenaria de Órganos de Vigilancia y Control del gobierno federal, agrupados en la Secretaría de la Función Pública, su coordinador general, Christian Ramírez, anunció que hay treinta casos prioritarios y citó, en este orden, los sobornos de Odebrecht y la farmacéutica israelí Teva, así como evitar la opacidad y la corrupción en el nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
Según mis fuentes, el gobierno federal mexicano ya solicitó a sus pares de Estados Unidos que le informaran quién era el funcionario de Pemex que había recibido dinero ilícito de la constructora brasileña. La respuesta oficial estadounidense habría sido que no tenían el nombre, que en la confesión de Odebrecht sólo se mencionaba que era un funcionario de Pemex, pero no se le identificaba.
En la administración federal los ojos están puestos en la gestión de Emilio Lozoya en Pemex, pues fue durante su mandato que se registró el soborno confesado por los brasileños. Lozoya fue quien llevó a Marcelo Bahía Odebrecht con el presidente Enrique Peña Nieto cuando su compañía buscaba expandirse en México.
Varios de sus colaboradores y funcionarios están bajo la lupa: Froylán Gracia García, ex coordinador ejecutivo de la Dirección General; Carlos Roa, ex coordinador de asesores; Arturo Enríquez Autrey, ex director de Procura y Abastecimiento; y Miguel Tame, ex director de Pemex Refinación y también ubicado como cercanísimo al añejo dirigente del sindicato petrolero, Carlos Romero Deschamps.
SACIAMORBOS. Armando Ríos Piter ya recorrió toda la geografía política y apenas tiene 43 años. Subsecretario de Gobierno en Guerrero con René Juárez, del PRI. Luego, subsecretario federal de Planeación de la Reforma Agraria en tiempos de Vicente Fox, del PAN. De ahí, secretario de Desarrollo Rural en Guerrero con el gobierno de Zeferino Torreblanca, del PRD. Se acercó a Ebrard y se peleó. Luego a Mancera y lo mismo. Ayer renunció al PRD. Ya descalificó a Morena, pero en una de esas… veremos qué sigue.
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