De una perspectiva negativa de cara a los tenedores de sus papeles o posibles compradores, las firmas la pasaron a positiva, es decir no hay problema de sobresaltos.
La andanada alcanza cartas a los directivos de las calificadoras, denostando la metodología con que ubicaron el salto.
Hace unos días Diez Gargari pasó dos semanas en España acompañado de Pedro Topete, el presidente de la firma que mantiene un litigio contra el gobierno del Estado de México por la anulación de un contrato para certificar por vía electrónica el flujo de las seis autopistas concesionadas, de lo cual culpa a OHL.
La misión consistía en enfocar ahora la campaña contra la matriz de la firma, ruedas de prensa, visitas a medios, entrevistas con líderes de opinión y demás etcéteras al calce…
Desde el inicio de la catarata, el año pasado, Infraiber y Díez Gargari han colocado en escena desde desplegados a toda plana en periódicos nacionales hasta denuncias de carácter administrativo contra OHL México, pasando por docenas de cartas de denuncias a funcionarios públicos.
La derrama de recursos es millonaria.
Naturalmente, la gran pregunta es quién patrocina la ofensiva que le ha costado a OHL México no solo la pérdida de prestigio sino la de rentabilidad en sus acciones, cuya cotización se ha ido a niveles insólitos.
En la ruta, sin embargo, la firma prepara una contraofensiva que incluye demandas por extorsión y daño moral, es decir la vía penal y la civil.
El primer caso se apuntala en un escrito sin firma entregado a los directivos de la matriz española en el que se solicita la entrega de 450 millones de dólares para parar la andanada.
Aunque la prueba no tiene efecto jurídico, la pretensión es que se valide el contexto, es decir los papeles de migración que reflejan el viaje a España de Topete y Díez Gargari; la estancia en el hotel de Madrid, los consumos, las notas periodísticas publicadas…
La segunda habla de 21 hechos calumniosos contra la firma que provocaron el desconcierto de socios y accionistas. Se habla, por ejemplo, de la afirmación de que la inversión, 24 mil millones de pesos, para la construcción del Circuito Exterior Mexiquense ya fue amortizada, por tanto los incrementos de tarifas atienden al mero afán de lucro.
Lo cierto es que hasta el año pasado la autopista de cuota alcanzó su punto de equilibrio, lo que permitió el inicio de la recuperación.
La concesión a 30 años se otorgó bajo la figura de rentabilidad garantizada.
Anteriormente OHL había colocado en la barandilla una demanda por violación a las leyes de comunicación al intervenir sus llamadas telefónicas, con la novedad de que el espionaje alcanzó al gobierno del Estado de México y a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.
La presunción apunta a que la autoría del ilícito recaiga en la empresa rival.
Las querellas de parte de Infraiber se han dado por la vía administrativa, en cuyo marco no se reclama para el perdedor el pago de costas y gastos del juicio.
Alguna vez abogado del Banco Nacional de Comercio Exterior, otro vocal del Instituto para la Protección del Ahorro Bancario, Paulo Díez Gargari conoce las intríngulis del sector hacendario y judicial.
OHL al contraataque.
Balance general. Colocada en ruta de colisión con sus acreedores, pese a que hasta hoy no enfrenta reclamos judiciales de cuantía, se está gestando una rebelión al interior del Grupo ICA. La flecha apunta a la familia Quintana, quien mantiene una tenencia accionaria del 7%.
La manzana de la discordia es la gestión como director general de Alonso Quintana Kawage hijo del presidente de la constructora, Bernardo Quintana Isaac, y nieto del impulsor del grupo de ingenieros que la fundó, Bernardo Quintana Arrioja.
La familia ha mantenido las riendas de la empresa con un paréntesis durante el sexenio de Miguel De la Madrid, el de Carlos Salinas de Gortari y un segmento del de Ernesto Zedillo, cuando ocupó la presidencia Gilberto Borja Navarrete.
A Quintana Kawage se le culpa de elevar el endeudamiento de la firma en 57%, a contrapelo de la pérdida de la capacidad de pago de ésta.
Su sucesor, Luis Zárate, fue presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción.
Esta tarde la empresa tiene reunión de su Consejo de Administración.
Trabuco mexicano. Le comentábamos el lunes que ante la inminente competencia extranjera los principales grupos gasolineros del país se estaban aliando al uno para todos. Bien, pues el primer consorcio de la tarde tendrá como razón social Summa, integrándose con siete grupos que aglutinan mil estaciones, es decir poco menos de la décima parte de las existentes.
La competencia se apuntala con tecnología de punta, lo que permite hasta 30 medios de pago que van desde tarjetas de crédito corporativas hasta transacciones vía celular, pasando por vales.
El trabuco está asociado con Circulo K, quien plantea diversas formas de negocios, por ejemplo la posibilidad de pago de servicios, además de pólizas de seguro para automóviles.
El consorcio lo lidera Hidrosina, quien cambio su razón social a El Gas.
Regresa Urbi. La desarrolladora de vivienda Urbi, quien logró sortear un concurso mercantil vía una reestructura de deuda, está convocando a una asamblea extraordinaria de accionistas para discutir su eventual regreso a la Bolsa Mexicana de Valores.
La estrategia habla de colocar lo que en el argot bursátil se conoce como Split inverso, es decir concentrar en paquete sus acciones en el mercado para equilibrar su precio con otras que lanzarían bajo el marco de emisión primaria.
Urbi mantiene en circulación 976.4 millones de acciones.
Rebatiña por TV. Abierta la posibilidad por parte del Instituto Federal de Telecomunicaciones para licitar unitariamente, en paquete o en cadena los 123 canales de televisión abierta pendientes de concesionarse, el abanico de postores se ha ensanchado al máximo.
En la lista, por lo pronto, hay 15, encabezados por Radio Centro, aunque en la ruta están dos cadenas radiofónicas más, en paralelo a tres diarios nacionales con acción multimodal.
Entre las firmas ajenas está el Grupo México de German Larrea Mota Velasco, quien es dueño de la cadena Cinemex.
albertobarrancochavarria0@gmail.com