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El turismo en México pasa por uno de sus mejores momentos. Se han alcanzado cifras récord en los principales indicadores y el sector se ha consolidado como uno de nuestros principales motores económicos, generador de empleos y de bienestar para los mexicanos.
Se estima que el país captó a casi 35 millones de turistas internacionales en 2016, es decir, 11.6 millones más que en 2012, el equivalente al número de turistas que reciben Brasil y Argentina juntos. Esto significa un crecimiento de 50% en los primeros cuatro años de esta administración, el triple del que se observó en el mundo en el mismo periodo.
Este dinamismo nos colocó desde 2015 como el noveno país más visitado del mundo y en 2016 podríamos superar esta posición. Este no es logro menor, si recordamos que en 2013 ocupábamos la posición 15 a nivel mundial.
Sin embargo, es necesario reflexionar sobre lo que debemos hacer para seguir consolidando al sector como uno de los principales motores económicos del país, sobre todo ante la coyuntura económica actual, la cual presenta un escenario global volátil, frágil e inestable.
Al respecto, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) presentó el documento Estudio de la Política Turística de México, sin duda una herramienta valiosa para darle un mayor impulso el sector.
La OCDE centró sus recomendaciones en las siguientes áreas prioritarias: marco institucional en el que se formulan las políticas turísticas; transporte, movilidad y conectividad; crecimiento turístico inclusivo, desarrollo de destinos y diversificación de productos y regiones; y financiación de las Pymes. De éstas, destaco tres recomendaciones.
1) En primer término, la OCDE señala la necesidad de complementar nuestro exitoso modelo de sol y playa con una nueva oferta regional de productos y el impulso a nuevos segmentos. Actualmente, los cinco principales destinos de playa en el país concentran 60% de los turistas internacionales.
Aunque hay mucho por hacer, los programas Pueblos Mágicos y Viajemos Todos por México han tenido grandes avances en la diversificación de destinos.
2) De la misma forma, la OCDE habla de la necesidad de fortalecer la cadena de valor del sector turístico. Hoy en día, 60% de los insumos de grandes cadenas hoteleras y restaurantes son importados, equivalentes a 9 mil millones de dólares, lo que significa que existe una enorme área de oportunidad para incluir a la proveeduría nacional, particularmente a las Pymes, a esta importante industria.
Con el fin de insertar exitosamente a la proveeduría nacional, se desarrolló el programa Conéctate al Turismo, destinado a vincular a los proveedores nacionales con los principales compradores del sector. Además, se han desarrollado programas de financiamiento con la banca de desarrollo a fin de incrementar y mejorar la oferta de crédito para las empresas del sector.
3) La OCDE también recomendó adecuar las instituciones para darle un impulso adicional al sector. En este sentido Fonatur y el CPTM deberán adaptarse para cumplir con las nuevas tareas y complementar los esfuerzos de instituciones estatales y municipales dedicadas a la promoción y fomento del Turismo en sus localidades.
Estoy seguro que las recomendaciones de la OCDE contribuirán a materializar uno de los objetivos que el presidente Peña se planteó desde inicios de su gobierno, que el país cuente con un sector turístico robusto, exitoso y que sirva de palanca de desarrollo para mejorar las condiciones de vida de todos los mexicanos.
Secretario de Turismo
