Gastar más de los ingresos que se perciben nunca ha sido una fórmula para que una empresa, una familia y menos un país se desarollen. En algún momento se tendrá que cubrir ese déficit en el que se ha incurrido, con consecuencias a menudo dolorosas si la riqueza de esa familia, empresa o país no se incrementó.

México ya conoció en las décadas de los 70 y los 80 de esas consecuencias funestas producto de mantener una deuda en niveles casi impagables. 1995 fue el año más reciente en el que la economía mexicana entró en shock, y de eso ya pasaron más de 20 años; desde entonces el manejo financiero que ha tenido el país se ha hecho con responsabilidad, resultado de varias medidas, entre ellas, la autonomía del Banco de México, que ha sido uno de los principales factores de estabilidad; a lo anterior se suman también las evaluaciones de calificadoras internacionales.

Este martes Standard&Poors, una de las tres calificadoras más importantes, dio un anuncio que debe representar una alerta para las finanzas nacionales. La firma cambió de “estable” a “negativa” la perspectiva de la calificación que tiene México, debido al crecimiento de la deuda del gobierno.

En dos años Standard&Poors podría degradar de BBB+ a BBB la calificación para México. ¿Que tendría que pasar para que se tome esa decisión? La calificadora es muy clara: si el nivel de deuda del gobierno general se incrementa o si la carga de intereses presenta un deterioro superior habrá una modificación a la calificación de la deuda de México. Advirtió cómo el índice de la deuda ha aumentado de manera continua desde 28% del PIB en 2005, a más de 40% actualmente.

Elogió, sin embargo, las medidas que ha tomado México ante las cambiantes condiciones internacionales, pues pese a la baja del petróleo y la depreciación del peso, hay un crecimiento estable e inflación baja.

La decisión de la calificadora debe considerarse únicamente como un oportuno llamado de atención para que la economía mexicana siga por la ruta del manejo correcto. Corresponde ahora a la autoridad enviar señales de que se tomarán las medidas adecuadas. Precisamente, un día antes del anuncio, la Secretaría de Hacienda dio a conocer que toma acciones para disminuir la deuda del gobierno.

En este mundo globalizado, las decisiones económicas que se toman en el país son puestas bajo la lupa de los más importantes expertos y centros de análisis del mundo. Nadie desea siquiera recordar lo que ocasiona un efecto tequila.

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