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Santiago Nieto Castillo, ex fiscal electoral, asegura que en su nueva encomienda de defender el voto al lado de Andrés Manuel López Obrador, no busca venganza, sino que haya justicia.

Conoció a López Obrador apenas la víspera, en un templete a las afueras de Guadalajara. Hace unas semanas lo buscó Marcelo Ebrard para que encabezara el diseño de un modelo de riesgo contra un posible fraude electoral en los comicios presidenciales del 1 de julio, tarea que él aceptó.

Asegura que el tabasqueño le dio toda la libertad para trabajar a gusto, a sus anchas, sin limitantes.

En entrevista con EL UNIVERSAL, Nieto Castillo argumenta su decisión de sumarse a López Obrador —aunque aclara que no se afiliará a Morena— “por dos temas de congruencia con él: el primero tiene que ver con el combate a la corrupción, él ha planteado que uno de los problemas centrales del país es la corrupción y yo coincido de manera plena.

“La corrupción inicia en los procesos electorales. Más allá de los temas de Odebrecht, de César Duarte, el punto central es cómo generamos los mejores diseños institucionales para combatir la corrupción.

“El segundo punto tiene que ver con la democracia. López Obrador ha planteado que la democracia implica el ejercicio libre del voto y yo coincido plenamente con esa idea: evitar la compra de sufragios y el condicionamiento de programas sociales, este es uno de los problemas más graves del país, que se ha intensificado a partir de esta administración, con la experiencia de Rosario Robles y Luis Miranda”.

¿Cómo conoció a AMLO?

—Lo conocí en el templete, nunca en mi vida había platicado con él. Lo saludé por allá de 1997, 1998, cuando él era presidente del PRD y fue al IFE, donde yo era asesor del consejero Jaime Cárdenas, en la época de José Woldenberg, pero no tuve ningún trato con él hasta ayer (martes) que conversamos sobre Odebrecht, corrupción y combate a las desigualdades.

Debemos cortar de raíz este elemento, el de la corrupción y la impunidad, y por eso la idea de trabajar con López Obrador. A nadie le conviene que se condicionen los programas sociales y veo una reacción muy fuerte del gobierno federal para hacerlo, eso es algo que debemos denunciar y combatir.

¿Cuál será el trabajo que va a realizar con AMLO?

— Sería el blindaje electoral, determinar cuáles son los espacios de riesgo por la vulnerabilidad del voto, donde se puede comprar el voto en relación con la última elección. Podemos ver en qué espacios hay casillas atípicas pues muchas veces corresponden a lugares donde los programas sociales tienen una mayor presencia y eso es lo que vamos a diseñar de aquí a la jornada electoral y que las autoridades electorales y las contralorías internas del gobierno federal tomen cartas en el asunto.

Usted como fiscal electoral tuvo acceso a mucha información, algunos pensarían que usted puede utilizar esa información en esta coyuntura...

—No, siempre mi actuación ha sido ajustada a derecho, en caso de tener información que no pudiera difundir, pues no lo haría, pero no hay ningún conflicto de interés. Esto sería si estuviera asesorando a dos partidos políticos.

Además, soy un ciudadano común y corriente, por lo tanto tengo la libertad del ejercicio de mis derechos políticos, que incluyen la reunión, la asociación y la expresión de manera política que, pienso, ejercemos de manera vehemente de aquí a que venga la jornada electoral.

¿Hay lugar para venganza en este momento?

—No, yo estaba haciendo mi función [en la FEPADE] y he desarrollado mi actividad a partir de entonces. No, yo pienso en justicia, pienso en Estado de derecho, pienso en cumplimento de normas y no en venganza, por supuesto.

Hubo críticas a Ximena Puente (ex presidenta del Inai) por aceptar una candidatura del PRI, ¿hay congruencia en su decisión al unirse a López Obrador después de haber jugado un papel tan importante en materia de justicia electoral?

—Hay diferencias. Yo no soy funcionario público. Ximena Puente era funcionaria y renunció para irse de candidata y yo no acepté ninguna candidatura ni trabajo, yo no voy por chambas. Lo que quiero es generar condiciones para que el proceso electoral se desarrolle de la mejor manera posible y, por ultimo, yo no me afilie ni afiliaré a Morena y ella sí lo hizo. Puedo ejercer mis derechos políticos electorales como considere.

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