José Antonio Meade acusó a AMLO de estar relacionado con socios de Odebrecht, la empresa brasileña protagonista de los sobornos a Pemex para ser favorecida con contratos.

Explicó durante el tercer debate del pasado martes 12 de junio que la familia de Javier Jiménez Espriú, propuesto por López Obrador como titular de la SCT en caso de ganar las elecciones, es la dueña de Idesa, empresa asociada con la también brasileña Braskem que es subsidiaria de Odebrecht.

Jiménez Espriú no es el dueño de Idesa, aunque figura como consejero suplente, ya que su esposa, Elisa Margarita Gutiérrez Saldívar, sí es accionista, tras heredar esa participación de su padre, Pascual Gutiérrez Roldán, quien la fundó hace sesenta años.

Elisa Margarita Gutiérrez Saldívar es tía del actual director de Idesa, Patricio Gutiérrez Fernández, y de su hermano, el actual embajador de México en Estados Unidos, Gerónimo Gutiérrez Fernández.

En este entramado de relaciones familiares-empresariales no hay delito demostrado, pero el simple hecho de vincular a un personaje tan cercano a AMLO con una empresa que es paradigma de la corrupción fue un gancho al hígado a quien ha puesto en el combate a ese cáncer, el centro mismo de su propuesta política.

Por eso es pertinente preguntarse de dónde salió el misil, y todo apunta a un personaje muy cercano a Meade, hoy asesor en su campaña política: Sergio Alcocer, quien dejó de ser su subsecretario de Relaciones Exteriores en julio de 2015 para buscar, infructuosamente, la rectoría de la UNAM.

Entre Alcocer y Jiménez Espriú hay una mala relación, primero política y después personal, que se remonta a la grilla universitaria, específicamente en la Facultad de Ingeniería, de la que ambos son egresados.

Jiménez Espriú (director de la Facultad de 1973 a 1978) fue amigo del padre de Alcocer, pero la relación se deterioró cuando aquel decidió darle la espalda a Sergio y apoyar las aspiraciones políticas de Gerardo Ferrando Bravo, a quien la comunidad de ingeniería lo considera su hijo putativo. Antes de ser director de Ingeniería, Jiménez Espriú fue secretario general de Administración de la UNAM, durante la rectoría de Guillermo Soberón, cargo en el que lo sustituyó Ferrando Bravo.

Tras un primer período al frente de la Facultad, Jiménez Espriú fue designado para un segundo, pero solo lo ejerció unas semanas, pues el presidente Miguel de la Madrid lo nombró subsecretario de la SCT (1982-1988).

En aquel gobierno, con el apoyo del subsecretario de la SCT, Ferrando Bravo, fue director del Metro (1983-1991) en una gestión marcada por acusaciones de corrupción. Con la recomendación de Jiménez Espriú y el apoyo del también ingeniero Gilberto Borja, entonces presidente del Patronato de la UNAM, regresó a la política universitaria para dirigir la Facultad de Ingeniería durante dos períodos (1999-2007), lo que frustró las aspiraciones de Sergio Alcocer, quien debió conformarse con la dirección del Instituto de Ingeniería (2003-2007) hasta que el rector José Narró lo designó secretario general de la Universidad.

En medio de esta trama, es probable que Alcocer guarde otro misil contra sus adversarios Jiménez Espriú y Ferrando Bravo. Este último, a la cabeza de la Facultad de Ingeniería, firmó un convenio con el IMSS para sistematizar los inventarios de medicamentos y servicios que, presumiblemente, resultó un fraude. La investigación la hizo Raúl Robles Segura, contralor de la UNAM durante la rectoría de Juan Ramón de la Fuente, aunque la denuncia fue presentada hasta la gestión de José Narro a través de quien fuera su abogado, Luis Raúl González Pérez. Hasta ahora está archivada, aunque al parecer no ha prescrito.

La gran aspiración de Alcocer sigue siendo la rectoría de la UNAM.

INSTANTÁNEAS. 1. FRACTURA. Las aspiraciones presidenciales de Ricardo Anaya no solo han fracturado al PAN. También al PRD. Su secretario de Operación Política, Vladimir Aguilar García reconoció ayer el inminente triunfo de AMLO en la Presidencia y de Claudia Sheinbaum en la jefatura de gobierno. Lo atribuye a que la conformación del Frente PAN-PRD-MC fue sectaria y a modo.

2. LEALTAD. En medio del intercambio de fuertes acusaciones que fue el tercer debate de candidatos a la Jefatura de Gobierno de la CDMX, la candidata frentista Alejandra Barrales mostró lealtad hacia Miguel Ángel Mancera al defender su gestión. Dijo que los ataques que hoy le enderezan son porque Mancera se negó a permitir un “diezmo” de los trabajadores del gobierno capitalino para financiar las aspiraciones de Delfina Gómez en el Estado de México y a tapar la corrupción en la Línea 12 del Metro. De paso denunció que los trenes del Metro que compró López Obrador durante su gobierno resultaron caros y malos.

2. DESPEGUE. Ante los perniciosos efectos de la caída en la producción petrolera, Campeche ha optado por el turismo. La inversión en el sector durante los últimos tres años fue de 100 millones de pesos, informa el gobernador Alejandro Moreno Cárdenas. La afluencia de visitante ha crecido 26% en Calakmul y 24% en San Francisco de Campeche.

Raúl Rodríguez Cortés

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses