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Este fin de semana López Obrador publicó en Twitter dos encuestas, una de Saba y otra atribuida al Gabinete de Comunicación Estratégica. En ambas aparece él en primer lugar, Ricardo Anaya en segundo y José Antonio Meade en tercero. En el mismo tuit Andrés Manuel plantea que es por esos resultados que lanzaron la campaña para vincularlo con los rusos.
Poco después de compartir esos números, Liébano Saenz, presidente de una de las empresas citadas, lo desmintió. Escribió así en la misma red social: “la encuesta que el precandidato López Obrador publica y atribuye a Gabinete de Comunicación Estratégica, no se corresponde con los estudios que nosotros hemos levantado y publicado en nuestra página. GCE no está haciendo tracking en esta campaña.”
Muy pocas encuestas han sido acertadas en las elecciones recientes. No es un fenómeno exclusivo de México, ocurre en buena parte del mundo. Cada vez confiamos menos en ellas, como cada vez confiamos menos en la clase política y en casi todo. La gente responde cada vez menos con la verdad a quienes hacen los sondeos. Teme que pueda haber represalias si menciona al candidato equivocado. Teme incluso abrir la puerta o tomar llamadas a desconocidos.
¿Cómo llegaron esos resultados a López Obrador? ¿Alguien lo engañó para luego exhibirlo? ¿Cómo juegan las encuestadoras en todo este embrollo? ¿Quién gana y quién pierde con la difusión y luego la descalificación?
Me parece que todos perdemos con episodios como este. Perdemos porque hace que crezcan la desconfianza, la descomposición, la polarización y hasta el asco a todo lo que huela a política.
El calendario no se va a detener con la elección. Antes de alimentar el encono, hay que pensar en el día siguiente.
HUERFANITO.— Luego de que 14 diputados chiapanecos renunciaran al Partido Verde por la postulación de Roberto Albores como candidato a la gubernatura, personajes con fuerza local como Eduardo Ramírez se vuelven interesantes para otros partidos.
En el frente que conforman PAN, PRD y Movimiento Ciudadano el acuerdo es postular al mejor posicionado. La medición está
en curso.
