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El Frente Ciudadano por México cobra forma y fuerza; el coqueteo de Nueva Alianza con el bloque opositor —PAN PRD y Movimiento Ciudadano— no es una señal despreciable; todo lo que escurra es miel.
Ante la inminente contienda electoral, tan cerrada y revuelta como viene, la cuota de votos del partido del magisterio podría hacer la diferencia, porque golpea al PRI, su antiguo cómplice, y porque haciendo cuentas ofrece la posibilidad de logar una suma ganadora a la coalición.
Basados en cifras de la elección federal de 2015 —última referencia política de pesos y medidas— el nivel de votación del PAN rondaría el 21%; el PRD podría “arañar” diez puntos; Movimiento Ciudadano aspira a una votación de 6%, y la inclusión de Nueva Alianza aportaría 3.5%, de modo que el “frente” opositor sumaría un hipotético 39% de la votación nacional, número más que suficiente para integrar un bloque realmente competitivo, aunque, en los hechos, la sangría perredista hacia Morena y la rebelión panista contra Ricardo Anaya, dejarán un boquete difícil de calcular. Aun así, el Frente Ciudadano por México es un supositorio para el PRI y sus protuberancias. También para López Obrador y su Morena.
A la compleja ecuación de 2018, añada los nombres y apellidos de los suspirantes ciudadanos e independientes: los periodistas Pedro Ferriz de Con y Alberto Vieyra Gómez; el gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez El Bronco (se apunta el sábado); el derecho-humanista Emilio Álvarez Icaza, el catedrático universitario Edgar Portillo y el senador independiente Armando Ríos Piter, hasta ahora. Todos están obligados a conseguir las 860 mil firmas de apoyo exigidas por la ley electoral para ir por la grande; ninguno parece dispuesto a declinar en pos de la fantasía de una candidatura ciudadana única, fuerte, audaz y valiente, lo cual, según analistas políticos, garantiza el fracaso de la intentona en cada caso.
Margarita Zavala come aparte. La esposa del ex presidente Felipe Calderón está en el ojo del huracán. Es rebelde con causa; a estas horas no duerme. Le apremia deshojar precisamente la margarita para decidir su futuro inmediato. La ex primera dama del país, acusada de intentar la reelección conyugal para su marido, no termina de definirse, aun cuando por ley tiene hasta el último minuto del próximo domingo para registrarse como independiente, para lo cual primero tendría que renunciar al PAN, ya que los candidatos ciudadanos no pueden pertenecer a partido político alguno. Sin embargo, Zavala, militante blanquiazul de abolengo, guarda la esperanza de convertirse en la candidata presidencial de su partido, no obstante, sabe que su postulación se mira virtualmente imposible, porque Ricardo Anaya se agandalla para no cederle el paso, ni en sueños. Para Margarita, quedarse con las manos vacías, después de tanto ruido y tantas nueces, no le parece una opción. “Ojalá Margarita no equivoque su decisión y actúe de manera sensata”, aconseja Diego Fernández de Cevallos, quien por cierto niega ser vocero, personero, achichincle o representante del líder nacional de su partido, Ricardo Anaya; “no soy gallo, ni amarrador de navajas, ni dueño de la pelea”, responde tajante; Anaya confirma los dichos de Diego.
EL MONJE RELOJERO: Es inminente la decisión de Enrique Peña Nieto para pronunciarse por un candidato presidencial de su partido. Sin embargo, una fuente muy confiable, cercanísima al proceso, asegura que el gran elector aún no ha dictado tan grave sentencia; que todavía lo está pensando; que baraja sus cartas y en la mano todavía trae cuatro ases: Miguel Ángel Osorio Chong, Aurelio Nuño, José Antonio Meade y José Narro. Pocos apuestan a que habrá “sorpresón” la víspera del 15 de noviembre, en cinco semanas, justo cuando el Congreso debe aprobar el paquete económico presentado por el secretario de Hacienda. El PRI, que no se maneja solo, acudirá ante el Tribunal Electoral para adelantar los tiempos pactados originalmente para el 12 de diciembre cuando, según el INE, deben iniciar las precampañas y hayan sido aprobadas las coaliciones electorales, incluido el frente PAN, PRD, MC y Panal, si finamente se consolida. Tic, tac… tic, tac…
@JoseCardenas1
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