Más Información
Sheinbaum descalifica reportaje del NYT sobre producción de fentanilo; “no son creíbles las fotografías”, dice
Piden ayuda para padre de Yolanda Martínez Cadena, hallada sin vida en NL; fue picado por araña violinista
Sheinbaum deuncia que el litro de gasolina alcanza los 26 pesos; alista reuniones de gasolineros y Sener para evitar aumentos
El escenario compagina lo que en el argot del comercio internacional se conoce como dumping, es decir cancelar la competencia vía precios ajenos a los de los costos de producción.
Naturalmente, el regalito de la empresa productiva de Estado a las gaseras no repercute en el público. A la vera de la liberación de precios éstas mantienen una abusiva escala ascendente.
Lo grotesco del asunto es que publicados semana a semana los precios de venta de primera mano, la realidad choca con el papel.
La tarifa se da bajo un mecanismo de segmentación diseñado por Pemex Transformación Industrial, en cuyo marco se establecen diversos niveles de descuento presentados con base en los niveles de compra del cliente.
Precios diferenciados, dicen.
El problema es que las firmas importadoras adquieren el producto en condiciones vigentes en el mercado internacional el día en que se realiza la operación, agregando al costo de adquisición; el pago de aduana; el de transporte, almacenamiento, distribución y comercialización, lo que a los precios de Pemex, vuelve la competencia incosteable.
Estos juran y perjuran que respetan la estacionalidad de las cotizaciones de referencia internacional de Mont Belvieu, es decir han bajado sus precios durante el verano.
La queja habla de una pérdida constante de clientela ante el escenario depredatorio de la ex empresa pública.
Publicados hace unos días en el portal de Pemex los precios diferenciados, la información se retiró a las 48 horas al percatarse que se estaba dando pauta a la evidencia para una posible demanda.
Sin embargo, el 22 de agosto pasado el escenario lo había desnudado la publicación internacional Oil Price Information Services.
Abiertas las fronteras en 2016 a los particulares para importar el combustible, desde entonces Petróleos Mexicanos instrumentó una política de protección de su clientela, ofreciéndole descuentos inauditos a contrapelo de sus precarias finanzas.
En este espacio denunciamos que en julio del propio año, con los atentos saludos de Marcelo Parizot Murillo, director de Pemex Transformación Industrial, se ofrecían descuentos de entre 24% y 38% a distribuidoras de gas LP.
Se calcula que el gesto filantrópico le habría costado a la ex paraestatal al menos 5 mil millones de pesos.
De hecho a partir de entonces se empezaron a plantear denuncias ante la Secretaría de Energía y la Comisión Federal de Competencia Económica por desplazamiento indebido de la competencia.
La justificación de la empresa hablaba de una sobreproducción, prometiendo que la oferta sería temporal.
Naturalmente, los descuentos se quedan en las arcas de las distribuidoras, que en el clímax de la voracidad no solo subieron sus precios, sino multiplicaron sus ventas con kilos incompletos.
Pemex, pues, ideó la fórmula mágica para mantener el servicio sin hacer olas.
Las preguntas saltan espontaneas: Si Pemex tenía opción de vender barato el combustible, a qué rayos los precios oficiales altos impuestos por Hacienda.
Del otro lado de la moneda, si se iba mantener la protección monopólica de Pemex, a qué rayos les dieron licencia a particulares para importar gas LP.
Eso se llama fraude.
Balance general. En el escenario que le coloca como el que dicta la línea en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, Estados Unidos está exigiendo protección especial para productos que ubica como “sensibles”, entre ellos las frutas y hortalizas estacionales.
La ruta habla de imponer cuotas o cupos, es decir limitar la exportación por parte de México. Dicho con todas las letras, de allá para acá frontera libre; de aquí para allá solo migajas.
¿Se acuerda usted del caso del azúcar?
Naturalmente, el país estaría en opción de exigir reciprocidad, la regla de oro del comercio internacional, ubicando a su vez bajo el mismo parámetro a productos que han sufrido una competencia depredatoria.
Ahí están por ejemplo, la pierna de cerdo, en un entorno en que las exportaciones estadounidenses alcanzaron el año pasado 686 mil toneladas, que representaron 99% del consumo nacional.
En esa misma ruta se situaría a la carne de pollo, cuyas exportaciones en Estados Unidos crecieron 748% entre 1999 y 2016.
Cliente para OHL. Publicada en España la intención de la empresa China State Construction Engineering Corporation de adquirir un segmento de acciones de OHL, la matriz de la firma instalada en México se vio obligada a enviar un comunicado a la Bolsa Mexicana de Valores.
En él se acepta que la empresa de la muralla ha solicitado la revisión y análisis de las tripas de la firma, pero hasta hoy no ha externado su decisión final.
Propietaria de 51% del capital de Obrascon Huarte Lain, la familia Villar Mir, el patriarca de ésta acudió la semana pasada a las cortes españolas para responder frente a denuncias de que habría obtenido contratos internacionales por la vía de sobornos.
Aguacate a China. Ante las barreras no arancelarias que Estados Unidos le está imponiendo a nuestras exportaciones de aguacate, la flecha está apuntando hacia China. La ruta la intentan abrir en acción conjunta Proméxico y la plataforma de venta en línea B21 del grupo Alibabá, vía una campaña digital.
Lo curioso del caso es que la mayoría de los consumidores son mujeres, quienes buscan los beneficios del fruto en la piel.
Los únicos países que mantienen protocolos fitosanitarios para exportar el producto a la nación milenaria son México, Chile y Perú.
Deuda vieja por nueva. La empresa AC Bebidas, filial de Arca Continental, presidida por Manuel Barragán Morales y dirigida por Francisco Garza Egloff, acaba de colocar una emisión de Certificados Bursátiles de largo plazo por 7 mil millones de pesos.
La posibilidad habla de llegar a 15 mil.
Los recursos serán destinados a refinanciamiento de deuda, es decir pagar al corto plazo aprovechando un mejor escenario crediticio.
La emisión fue calificada por Fitch Ratings como AAA (mex) y por Standard & Poor’s como mxAAA.