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De acuerdo con el Instituto para el Desarrollo Industrial y Crecimiento Económico, la industria acumulaba en los primeros ocho meses del año un crecimiento negativo de 4%, frente a 3% del mismo lapso de 2016.
Durante agosto pasado la caída fue de 0.5%.
El desplome alcanza prácticamente todas las ramas, con la salvedad, la excepción que confirma la regla, de las manufacturas, cuyo salto en el lapso es de 3.3%.
El cuesta abajo en la rodada tiene su clímax en la minería, con un retroceso en términos anualizados de 9.7%, con la novedad de que los servicios relacionados tienen una caída de 26.2%, en tanto la extracción de petróleo y gas se cayó 10.8% y el sector metálico y no metálico por consiguiente registra un crecimiento modesto de 0.9%.
Ahora que el estancamiento alcanza a la industrias de electricidad, agua y gas, con movimientos erráticos cuyo promedio muestra un retroceso hasta agosto pasado de 0.6%.
Y aunque el promedio de la industria manufacturera es positivo, con énfasis en un crecimiento acumulado de 14.4% en maquinaria y equipos y 8.1% en madera y muebles básicos, hay una caída dramática en derivados de petróleo y carbón de 15.2% y de textiles, de 12.1%.
Hace algunos meses, en un evento realizado en Campeche con asistencia de directivos de organismos empresariales, una de las asistentes se enorgullecía de que en su natal Tijuana se producían miles de televisores para el mercado de Estados Unidos.
Lástima, le dije, que la marca no sea mexicana.
Concentrada la tarea de promoción en facilitar el ingreso de empresas maquiladoras cuyas materias primas se importan del exterior con apoyo de los llamados programas Invex, es decir importar para exportar, lo que las libra de aranceles, se dejó de lado la actividad productiva.
Ahí está, inscrita en letras grises, la famosa frase, de Jaime Serra Puche quien fuera secretario de Industria y Comercio en la negociación del TLCAN, en el sentido de que el mejor programa industrial del país es el que no existe.
México rompió todas las marcas en la firma de tratados comerciales, dejando de lado la parte toral, es decir reforzar el potencial exportador vía diseño, tecnología.
En el auge de la liberalización comercial, algunas de las empresas productivas del país cerraron sus puertas para convertirse en importadoras, al grito de si no puedes con el enemigo, únete a él.
La mayoría de los países le coloca el énfasis en materia de mercancías exportables a las tres o cuatro ramas en los que muestra mayor fortaleza, integrando paulatinamente al resto.
En algunos casos la oferta se crea a rajatabla. Hace una década China desquició el mercado del acero con compras espectaculares en cuyo marco se llegó a provocar escasez: Seis años después el país de la muralla volvió a desquiciar los mercados, sólo que ahora con una sobreoferta del producto.
De acuerdo con las listas aduanales, son apenas 160 las empresas nacionales que exportan productos fabricados totalmente en el país, con énfasis en cerveza, cemento, vidrio y autopartes.
Se estanca la industria.
Balance general.
Con la presencia, a saber si en calidad de advertencia o de aval, del abogado de moda, Javier Coello Trejo, el presidente de la Concanaco, Enrique Solana Sentíes, desmintió que parte de los recursos otorgados por el Instituto de Apoyo a Emprendedores para apoyo técnico de pequeños comercios se hayan desviado hacia empresas fantasma.
De acuerdo con el directivo son reales las empresas que según el dirigente de Nueva Alianza, Juan Carlos Pérez Góngora, candidato a la presidencia no existían en los domicilios que se habían señalado en las facturas.
Sin embargo, Solana presentó a los directivos de las compañías en entredicho, entre ellas Trixbox de México, Emco Soluciones de Software, Integra Servicios y Soluciones Empresariales y Corporativo de Asesoría y Consultoría para el Desarrollo de Negocios, además de sus declaraciones fiscales.
Si existen, pues.
De acuerdo con Pérez Góngora las firmas señaladas como fantasma habrían facturado 84 millones 119 mil 140 pesos de un total de 159 millones 346 mil recibidos.
Ruido de OHL.
A la rebatiña de los contratos para la construcción del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México llegó la firma Constructora de Proyectos Viales de México, quien es subsidiaria de la matriz española de OHL México, aunque sin relación con ésta.
La compañía de Obrascón Huarte Lain ha peleado sin éxito tres contratos. Sin embargo, al parecer tiene opción para la construcción del Centro Intermodal de Transporte Terrestre del coso, lo que ha provocado ruido entre el resto de los participantes.
En la ruta se están sacando trapitos al sol de la compañía hispana, entre ellos los llamados “Papeles de Barcelona” que destapan un presunto financiamiento ilegal al Partido Popular en el poder.
En paralelo, se aluda a la “Operación Lezo” en la que se involucra en un presunto soborno para la adjudicación de un proyecto financiero a Javier López Madrid, yerno del presidente de la empresa, Villa Mir.
Fiesta de cumpleaños.
Ayer, a la vera de los 20 años del nacimiento de las administradoras de fondos para el retiro, se recordó la tórrida batalla para dar cauce a una de ellas con participación mixta en el capital. Estamos hablando de la Afore XXI, hoy XXI Banorte, convertida en líder del mercado.
La intermediaria público-privada, cuya mitad del capital lo mantiene el IMSS, se apuntaló con su Consejo Técnico, en el que participaban el hoy secretario de Salud, José Narro Robles; el entonces secretario del Trabajo, Javier Moctezuma Barragán, y el director del organismo, Genaro Borrego.
Por el sector empresarial con la bandera de Concamin estaban Ernesto Rubio Del Cueto, Fernando Yllanes Ramos y Rafael Fájer García; con la de Concanaco estaba Marco Antonio Dueñas González.
Por la CROM estaban Ignacio Cuauhtémoc Paleta y Daniel Sierra, además de los representantes de la CTM y el sindicato minero, Alfonso Sánchez Madariaga y Filiberto Rodríguez Daniel.
Lala a Hidalgo
. Con una inversión de mil millones de pesos el Grupo Lala de Eduardo Tricio abrió ayer operaciones en una planta de su división de carnes frías, bajo la razón social Nutri Deli, localizada en Hidalgo, concretamente la zona industrial de Tizayuca.
Se presume que la factoría será la más moderna del país en su ramo.
Anexo a esta se instalará un Centro de Tecnología e Innovación.
albertobarrancochavarria0@gmail.com
