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El delito que más lesiona a las finanzas públicas no es el robo de combustibles, considerado problema de seguridad nacional, sino el robo de electricidad y facturas que no se han podido cobrar a 6 millones 941 mil usuarios desde 1994 hasta la fecha, incluidos clientes domésticos, gobiernos estatales y municipales, así como organismos operadores de agua.
Esos problemas le representan a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) pérdidas por 76 mil millones de pesos: 40 mil millones por el robo de energía eléctrica y 36 mil 359 millones por facturas no cobradas, de acuerdo con información proporcionada por la empresas a través de la Plataforma Nacional de Transparencia.
Esos recursos son 2.5 veces más lo que los huachicoleros roban a Petróleos Mexicanos (Pemex), delito que le provoca pérdidas a la petrolera, a estados, municipios y entidades como PGR, Sedena y Marina por 30 mil millones de pesos anuales.
Los registros de CFE, con información a marzo de 2018, revelan que en el Estado de México hay un millón 967 mil 376 clientes que tienen adeudos con la empresa, que no han podido ser cobrados, por casi 11 mil 512.9 millones de pesos.
La Ciudad de México es el segundo sitio que concentra mayor número de deudores, con un millón 46 mil usuarios, con un adeudo de 6 mil 92 millones de pesos. Las entidades le representan pérdidas a la empresa por 17 mil 604 millones, es decir, 48.4% del total no facturado.
Otros 521 mil clientes tabasqueños presentan adeudos por el uso energía eléctrica no facturada por 8 mil 30 millones de pesos; en Chiapas, 876 mil 437 usuarios adeudan 2 mil 969 millones de pesos, mientras que en Guanajuato 101 mil 579 usuarios le deben a CFE 2 mil 55 millones de pesos.
EL UNIVERSAL publicó el pasado 26 de marzo que entre 10% y 16% de las pérdidas por robo de electricidad se concentran en la Ciudad de México y el Estado de México.
En total, el robo de electricidad, de acuerdo con el propio director de la empresa, Jaime Hernández, asciende a 40 mil millones de pesos.
Lo que se le fuga a CFE por robo de energía eléctrica y adeudos por cobros no facturados asciende a 76 mil millones de pesos, de los cuales 30 mil millones, es decir igual que el valor de lo que los huachicoleros y el crimen organizado le roba a Pemex y el costo por combatir el flagelo anualmente, son facturas no cobradas a clientes de cuatro entidades: la capital, Estado de México, Tabasco, Chiapas y Guanajuato.
Los registros de CFE revelan que los estados más morosos, con un importe de más de 360 días vencidos en la facturación, sobre todo por el servicio de alumbrado público y oficinas y edificios de dependencias gubernamentales, lo encabeza el Estado de México, cuya deuda con CFE asciende a 109 millones 291 mil pesos. Baja California tiene el segundo lugar, con 67 millones 128 mil pesos.
Chiapas y la Ciudad de México son otros clientes incumplidos, ya que han usado el servicio de energía eléctrica y no han pagado facturas por 41 millones y 15 millones 384 mil pesos, respectivamente. El listado de los municipios con adeudos por facturación no pagada de electricidad, con importes de más de 360 días vencidos, es enorme e involucra directamente a 931 gobiernos.
Hay municipios cuyas deudas resultan tan escandalosas que superan a cada uno de los cuatro de los principales gobiernos estales morosos como Texcoco, que debe 579.4 millones de pesos.
En estos casos y cuando se trata de clientes domésticos, empresas y gobiernos estatales y municipales, la CFE lleva a cabo convenios para regularizar adeudos. Una de las formas empleadas para resolver el problema es recurrir a cortes del servicio eléctrico. CFE entregó información en la que señala que entre diciembre de 2017 y enero de 2018 le ha bajado el “switch” para suspender el suministro de energía eléctrica a 216 municipios.
