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Los gigantes de las redes sociales están "fracasando conscientemente" a la hora de regular el uso de sus plataformas como herramienta para promover el terrorismo, según un informe de la Cámara de los Comunes del Parlamento británico.
Compañías como Google, Facebook, Twitter y Youtube fueron acusadas en este análisis de "escurrir el bulto" y de crear espacios en la red "sin gobierno y sin ley", teniendo en cuenta que Internet contribuye a que las personas se radicalicen.
La Comisión de Asuntos del Interior del Parlamento británico informa en el documento de que las redes sociales son "los medios elegidos para difundir propaganda" y de que se han convertido en "plataformas para reclutar terroristas".
El presidente de la Comisión, el diputado laborista Keith Vaz, comentó que los foros, los tablones de mensajes y las redes sociales se han convertido en el "alma de Daesh" (Estado Islámico) y otros grupos terroristas para reclutar personas afines a la causa y encontrar financiación.
Según Vaz, "las grandes corporaciones como Google, Facebook y Twitter, con sus ingresos multimillonarios, están fracasando conscientemente a la hora de afrontar esta amenaza y están escurriendo el bulto escondiéndose detrás de su estatus legal supranacional, a pesar de ser conscientes de que sus plataformas están siendo utilizadas por los terroristas".
"El fracaso en la resolución de este problema por parte de las compañías ha dejado espacios en Internet sin gobierno, sin regulación y sin ley", añadió el parlamentario.
Es "alarmante" que haya equipos de "solo unos cientos" de empleados que controlen billones de cuentas o que Twitter no informe de forma proactiva sobre el contenido de carácter extremista a los organismos encargados de hacer cumplir la ley, advierte el informe.
La maquina de propaganda que el Estado Islámico ha creado a través de Internet se ha convertido en un reto para las autoridades en la lucha contra la radicalización.
A principios de este año, las cifras reveladas mostraban que un grupo de la policía británica retira cada día cerca de 300 mensajes con contenido extremista.
La semana pasada salieron a la luz los problemas que tuvieron las autoridades para conseguir que los mensajes y comentarios publicados por el clérigo Anjem Choudary fueran retirados, incluso después de que éste fuera detenido por promover el apoyo al grupo yihadista.
La cuenta de Twitter de Choudary, condenado a diez años de cárcel, que llegó a tener 32 mil seguidores fue finalmente eliminada.
Ante la información obtenida por la Cámara, el comité ha abogado por que las empresas publiquen estadísticas trimestralmente en las que muestren cuántas cuentas y páginas han cerrado y expliquen el porqué.
"El Gobierno debe desarrollar herramientas efectivas para contrarrestar la hábil y eficaz máquina de propaganda creada por Daesh", sentenció Vaz.
Tanto Google como Twitter y Facebook respondieron al comité que han asumido este asunto de forma seria y responsable, y que han cooperado con los organismos de seguridad cuando ha sido necesario.
Twitter anunció recientemente el cierre de 235 mil cuentas por promover el terrorismo en los últimos seis meses y condenó nuevamente el uso que se hace de la red social para hacer apología de estas acciones.
Por su parte, Google informó al Comité de la retirada de más de 14 millones de vídeos relacionados con todo tipo de abusos en todo el mundo.
Actualmente, el nivel de amenaza terrorista en Reino Unido es severo, lo que significa que es probable que pueda haber un ataque terrorista.