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Más de 50 organizaciones civiles y académicos de diversas instituciones universitarias expresaron su rechazo a la iniciativa de Ley General de Biodiversidad presentada en el Senado, argumentaron que la propuesta contiene las mismas “omisiones” de la Ley General de Vida Silvestre que han generado la sobre explotación y detrimento de las especies silvestres mexicanas.
En un pronunciamiento solicitaron el retiro inmediato de la Iniciativa de Ley General de Biodiversidad y la creación de un espacio en el que la población de todo el país discuta la nueva propuesta, esencialmente enfocada a la Conservación de la Biodiversidad.
Acusaron que la propuesta es “un mosaico de parches copiados de otras leyes”, incluyendo secciones completas de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (LGEEPA); advirtieron que la iniciativa de ley dificulta la incorporación de nuevas Áreas Naturales Protegidas y desprotege las actuales, al hacer más permisivas las actividades en zonas restringidas.
El documento firmado por organizaciones como Greenpeace, Animal Heroes, el Centro para la Diversidad Biológica, entre otras, señalaron que el proyecto es incongruente dado que introduce el Principio de no Regresión el cual implica que “no puede haber retroceso frente al nivel de protección previamente alcanzado, para inmediatamente violarlo al quitarle la protección a especies en peligro de extinción y amenazadas como es el caso de los pericos y guacamayas”.
Expresaron su preocupación por la eliminación del concepto Trato Digno y Respetuoso a la Fauna Silvestre en el proyecto de ley, argumentaron que la mayoría de la fauna silvestre que se aprovecha en México se hace con animales vivos y que es el único instrumento legal que tiene la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente para fundamentar la mayoría de sus procedimientos de aseguramiento y/o decomiso de fauna bajo confinamiento.
En octubre del año pasado la senadora Ninfa Salinas Sada, representante del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), presentó una iniciativa para la creación de la Ley General de Biodiversidad (LGB), que de aprobarse, produciría la abrogación de la Ley General de Vida Silvestre (LGVS).
Las organizaciones detallaron que ambas normativas abordan conceptos diferentes, puesto que la iniciativa de Ley de Biodiversidad abarca gran cantidad de temas respecto a la protección de los ecosistemas, en tanto que la Ley General de Vida Silvestre se enfoca en la conservación, aprovechamiento y protección de la fauna y la flora silvestres.
“Nos preocupa que al presentar tantos errores de forma y fondo, la propuesta todavía sume las mismas fallas y omisiones que presenta la LGVS, y que particularmente han sido causa de sobre explotación y detrimento de las especies silvestres mexicanas, dado lo cual ha venido en aumento su inclusión en alguna categoría de riesgo”, alertaron.
Enfatizaron que no hubo un análisis puntual de la Ley General de Vida Silvestre para que el nuevo proyecto de ley no tuviera las mismas deficiencias las cuales han dado como resultado un sistema de aprovechamiento de la vida silvestre imposible de supervisar y mucho menos de controlar por parte de las autoridades competentes.
“La LGB copió de la LGVS no sólo sus graves omisiones, sino también las violaciones a la misma que han sido plasmadas en su Reglamento, al crear figuras jurídicas inexistentes. En lugar de intentar resolverlas quedan ignoradas prolongando el actual problema legal para los ciudadanos que realizan actividades de aprovechamiento o conservación de especies silvestres, en detrimento de su conservación”, apuntaron.
