Los jóvenes necesitan entender que la historia no es un conocimiento “erudito” exclusivo de unos cuantos, sino parte indispensable de la formación para ser un ciudadano capaz de comprender su pasado y actuar en el presente, a fin de enriquecer la construcción del país, afirmó Patricia Galeana, directora general del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM).
Los más de 84 mil ejemplares que conforman el acervo del INEHRM abarcan etapas fundamentales de la historia de México, como la Independencia, la Guerra de Reforma y la Revolución.
Entre las obras resguardadas en la casona de corte colonial que instala el instituto se encuentra La historia de la Constitución de 1917, escrita por Félix Fulgencio Palavicini, fundador de EL UNIVERSAL y destacado constituyente.
Patricia Galeana comentó a EL UNIVERSAL que en el marco de la celebración del centenario de este documento, la obra de Palavicini es una “lectura obligada” para todo interesado en conocer la historia de la Carta Magna que actualmente nos rige, puesto que hace una crónica del proceso por el que se conformó la Asamblea Constituyente, la elección de los integrantes de este órgano tras el golpe de Estado de Victoriano Huerta, así como los debates en los que se gestaron artículos fundamentales como el 3, 27 y 123, en los que se plasman los derechos sociales perseguidos durante la lucha revolucionaria.
“Es una lectura obligada, una fuente de primera mano indispensable para todo aquel que quiera conocer cómo se originó esta idea de hacer una nueva Constitución, cómo fue la elección de los constituyentes y todos los debates que se dieron para que finalmente surgiera la Carta Magna que por vez primera establece los derechos sociales en un texto constitucional. Dos años antes de que lo hiciera en Alemania la Constitución de Weimar”, comentó.
Detalló que el fundador de El Gran Diario de México relata los cuestionamientos a los que tuvo que enfrentarse por haber formado parte de la 26 Legislatura, durante la cual se presentó “el cuartelazo de Victoriano Huerta, que devino en el asesinato de Madero” y porque en la convocatoria para la elección de los constituyentes se estableció que quienes hubieran colaborado con Victoriano Huerta o hubieran sido —sin importar de qué manera— parte de la convención que estuvo en guerra contra los constitucionalistas no podían ni debían formar parte de la Asamblea Constituyente.
“El problema se aclaró cuando el propio Venustiano Carranza mandó un telegrama al Congreso, convertido en Colegio Electoral, para calificar la elección, señalando que Palavicini y otros miembros de la 26 Legislatura habían permanecido en ella para oponerse a las acciones del usurpador desde la tribuna y que no lo estuvieron apoyando, sino todo lo contrario.
“Después se acreditó en el caso de Félix Palavicini que justamente no sólo se opuso en tribuna al magnicidio y a todo lo que hizo Huerta, sino que cuando fue disuelto el Congreso por el propio Huerta, pues fue a dar a Lecumberri y fue encarcelado con los otros diputados de esa 26 Legislatura. Palavicini nos refiere aquí todos estos hechos”, destacó.
La directora general del INEHRM comentó que en los dos tomos de esta obra, publicada por primera vez en 1938, se narra cómo quedaron acreditados los diputados, a qué estado representaban, las discusiones con las cuales se gestaron los artículos fundamentales de la Carta Magna, al tiempo que incorpora anécdotas vividas por Palavicini y los artículos periodísticos que redactó en este periodo.
“Fue un destacadísimo periodista al que Francisco I. Madero le escribió una carta diciéndole que su pluma era inigualable, que su forma concisa de escribir, con frases cortas, claras y directas, era inigualable. Por eso es que Palavicini va a sustituir a Vasconcelos en la dirección del periódico El Antirreeleccionista. Dirigió muchos periódicos, como El Imparcial, El Pueblo, El Demócrata, Vanguardia de Orizaba y, finalmente, fue fundador y director de EL UNIVERSAL, que tiene por objetivo dar justamente la reseña de todo lo acontecido en el Constituyente y dio las primicias del proceso antes de que fuera promulgada”, relató.
La primera publicación que formó parte de la Biblioteca Constitucional del INEHRM fue La historia de la Constitución de 1917, debido a que Félix Fulgencio Palavicini fue “un destacado miembro de la Asamblea Constituyente y el primero que describió la historia y explicó cómo se hizo la Constitución”.
La también catedrática de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM comentó que conocer las normas de convivencia que nos rigen es una manera de constituir ciudadanos informados que cumplan sus derechos y conozcan sus obligaciones, puesto que la democracia es una forma de vida.
“La Constitución nos garantiza que seamos una ciudadanía informada, que cumplamos con esos derechos y por parte de las autoridades, las obligaciones. Esta forma de conocer las normas constitucionales nos permite hacer lo que Jaime Torres Bodet escribió en el artículo 3 constitucional: que la democracia es una forma de vida; entonces ser ciudadanos no es nada más ir a votar, sino toda una actitud cotidiana con nuestros familiares, con nuestros hijos, con todo; es la forma de vivir en paz”, expresó.
Para poner al alcance de las nuevas generaciones obras históricas como la de Palavicini, los usuarios las pueden descargar a través de la página www.constitución1917.gob.mx; además, el INEHRM cuenta con programas de radio, así como cápsulas que ofrecen el contenido de estas obras, las cuales son difundidas en las redes sociales del instituto. Patricia Galeana adelantó que próximamente se transmitirán en espacios televisivos por el Canal 22.
Rumbo a la celebración por el centenario de la Constitución de 1917 se realizarán eventos tanto en la Ciudad de México —en el Palacio Nacional— como en Querétaro, donde en el Teatro de la República tendrá lugar una ceremonia. Habrá actividades editoriales, conferencias y seminarios con constitucionalistas internacionales, los cuales iniciarán a partir de febrero del próximo año.
“La Constitución de este país ha tenido impacto internacional, no sólo por materia de derechos sociales, es muy importante ver la influencia que tuvo el agrarismo mexicano en el derecho agrario de América Latina y también en el tema del amparo como una protección del ciudadano frente a la autoridad, el cual también ha tenido impacto internacional”, dijo la directora del INEHRM.
Inaugurada el 6 de mayo de 1994, la Biblioteca de las Revoluciones de México ocupa el área principal de la Casona de los dos patios, sede del INEHRM; este espacio inició sus actividades con un fondo de 8 mil volúmenes especializados en la Revolución.
Hasta septiembre de 2016, de acuerdo con sus registros, posee más de 84 mil ejemplares, entre libros, folletos y revistas. Con la ampliación del campo de estudio del instituto, la biblioteca contará con un fondo especializado en la historia de la Independencia, Reforma liberal y la transición democrática.
La totalidad del acervo de la biblioteca está ordenado en 12 colecciones y puede consultarse en el catálogo en línea.
El instituto también cuenta con una fototeca, la cual alberga la colección del periódico El Nacional; “para la historia reciente de México es una fuente muy rica”.