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justiciaysociedad@eluniversal.com.mx
Alrededor de 102 jóvenes que mantuvieron tomadas las instalaciones de cinco escuelas vocacionales del Instituto Politécnico Nacional (IPN) impidieron el regreso a clases de 15 mil 353 jóvenes de nivel medio superior.
Los jóvenes que dicen representar a sus asambleas y comunidades alegan que mantienen el paro de actividades porque la autoridad no ha resuelto sus pliegos petitorios, los cuales van desde exigir un diálogo con el secretario Educación, Aurelio Nuño, hasta establecer el pase reglamentado a la educación superior para sus escuelas.
En la mesa de diálogo con los alumnos, Enrique Fernández Fassnacht, director general del IPN, dijo a los estudiantes que el plazo fatal para alumnos de sexto semestre de las cuatro vocacionales se cumple este fin de semana, cuando se realizan los exámenes de ingreso a educación superior.
Durante la reunión con integrantes de la Asamblea General Politécnica, el director general del IPN respondió así a la pregunta de los estudiantes, quienes le pidieron dar una fecha para las vocacionales 11,14, 15 y el Centro de Estudios Tecnológicos 1 que hoy permanecen en paro y que buscan no perder el semestre.
“Hay una fecha fatal programada desde hace tiempo que se cruza con los exámenes de admisión del sábado y domingo. Eso no significa que tienen de aquí al viernes. Tienen que normalizar sus actividades escolares”, les advirtió.
A su vez, David Cuevas, abogado general del instituto, dijo que los alumnos “están creyendo en versión mesiánicas de alguien que dice: ‘yo vengo a salvarlos, y la salvación está en que mantengan el paro hasta que llegue el examen y verán que no pasa nada’. Ese es el tema, se está imponiendo una versión que es una mentira, un engaño que traerá consecuencias irremediables. Ese mesías va a seguir tan tranquilo, como si nada; los promotores del paro también, a pesar de haber afectado a las personas”, advirtió.
Tras el encuentro, la Vocacional 14 anunció el regreso a clases hoy.
Ausencia. Quienes custodian los planteles son alrededor de 102 personas que impidieron el regreso a clases de 15 mil 353 estudiantes, de acuerdo con información de autoridades del IPN.
En un recorrido de EL UNIVERSAL por las instalaciones de las cinco escuelas se comprobó que son grupos pequeños los que custodian los planteles, de entre ocho y 30 personas. Sin embargo, según los estudiantes, las cifras son variables porque las guardias son voluntarias. Se comprobó que los jóvenes sólo permiten el acceso a estudiantes que portan su credencial. En el CECyT 11 se permite el paso a maestros y trabajadores de limpieza.
En todos ellos se realizaron reuniones de asamblea para determinar qué ocurrirá en las siguientes horas.
Estudiantes consultados señalaron que someterán la determinación de entregar sus planteles a la votación de la comunidad, pero este proceso se daría durante esta semana y de esta manera el paro se extendería cuando menos hasta el lunes.
En el Centro de Estudios Tecnológicos 1 Walter Cross Buchanan, en San Juan de Aragón, los jóvenes que custodian la entrada del plantel comentan que son entre ocho y 15 alumnos quienes resguardan las instalaciones, aunque en ocasiones han llegado a ser hasta 20.
Explicaron que no siempre permanecen los mismos estudiantes, sino que se van “rolando” de manera voluntaria para estar por la mañana o pasar la noche. Sólo pasan quienes acrediten ser alumnos del CET 1 al enseñar su credencial a la entrada; a los maestros sólo se les permite pasar al baño. En tanto, en el Centro de Estudios Científicos y Tecnológicos Número 3 Estanislao Ramírez Ruiz, el cual se mantiene en paro activo, el ambiente que se percibe tras casi un mes de paro es “muy confuso”, describió Bruno Chong Pérez.
Explicó que hace dos semanas se había aprobado regresar a clases, sin embargo, no se reanudaron, por lo que nuevamente se hizo una votación para determinar si el paro se mantiene o se levanta, y, de ser así, decidir cuándo se retomarían las clases.
Paola Sosa Cruz, quien cursa el sexto semestre, detalló que no hay estudiantes que se queden a “acampar” en el plantel o que resguarden las instalaciones, sólo se ha decidido en las asambleas suspender clases, se sigue permitiendo el acceso a profesores, administrativos y a los jóvenes que realizan servicio social, así como a los alumnos que requieran hacer un trámite.
“Sí nos afecta el paro, más a los que estamos en sexto semestre. No sabemos cuándo nos van a entregar nuestros papeles para poder entrar a las escuelas superiores. Ahorita tendríamos que estar de vacaciones, pero llevamos un mes sin clases”, indicó.
A pesar de las asambleas en todas las escuelas, también existen grupos estudiantiles y padres de familia que están en contra de mantener cerradas las escuelas y se preocupan de que se vaya a perder el semestre.
En el CECyT 11, el Comité de Representación Estudiantil Wilfrido Massieu (CREWM) sostiene que el paro no se justifica y que hay profesores impulsándolo a través de los alumnos.
Preocupación. El lunes, padres de familia y estudiantes se presentaron desde las 07:00 horas para preguntar si habría clases. Aunque muchos de los que llegaban saludaban a los estudiantes que resguardaban la entrada y decían que apoyaban al movimiento, también se regresaban preocupados.
“Vengo a dejar a mi hijo pensando que iba a haber clases y me encuentro con unas mantas que hablan de una situación diferente a la que habíamos tenido. Ahora pretenden que sea una cuestión política y de la reforma educativa, que es algo que no tiene que ver con las vocacionales. Es una estupidez”, comentó Saúl Alcántara, padre de familia.
En el CECYT 15 hay un Comité Contra la Suspensión de Labores, que pide regresar a clases. Aun así, las clases de idiomas o los cursos para el examen de ingreso al bachillerato se llevan a cabo en el Colegio de Bachilleres 14 de Milpa Alta. Aquí se decidió mantener el paro toda la semana; el viernes entregarán las instalaciones y planean regresar a clases el lunes.