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Las universidades tecnológicas (UT) y politécnicas (UP) del país implementan actualmente un modelo de estudios bilingüe para reducir el rezago del nivel de inglés de los estudiantes y aumentar sus capacidades, a fin de que sean más competitivos a nivel nacional e internacional al momento de entrar en el mercado laboral, y así responder a las necesidades de las empresas.

Desde 2012, el subsistema de universidades tecnológicas y politécnicas de la Secretaría de Educación Pública (SEP) impulsa el modelo de educación bilingüe, internacional y sustentable (BIS) en 15 de estas instituciones a través del país, en donde se desarrolló un esquema pedagógico en el cual las materias de las diferentes carreras ofrecidas son impartidas en idioma inglés.

Hasta julio pasado se tenía una matrícula de 3 mil 613 estudiantes que llevaban este modelo de estudios bilingüe inglés-español, aunque se estima que este número podría aumentar de manera importante debido a que el nuevo cuatrimestre inició a principios de septiembre y se actualizarán las cifras en octubre próximo.

“Los jóvenes del nivel medio superior ya están entendiendo y están aceptando que el idioma inglés no es algo opcional, sino un requisito para poder obtener un buen trabajo y sobre todo que las empresas que están instaladas aquí en Aguascalientes solicitan el inglés como requisito para poder trabajar”, dijo Patricia Saracho Martínez, rectora de la Universidad Tecnológica El Retoño (UTR).

En entrevista con EL UNIVERSAL, la rectora de esta institución universitaria ubicada en el municipio de El Llano, Aguascalientes, afirmó que la respuesta ante este modelo educativo ha sido buena, pues la matrícula de esta universidad que tiene más avanzado este esquema de estudios bilingüe pasó de 310 estudiantes en 2012 a 780 al inicio del cuatrimestre que empezó este mes de septiembre.

“Estamos creciendo y vamos a seguir creciendo”, anticipó la rectora Saracho Martínez.

De acuerdo con el modelo, los estudiantes llevan inglés desde el primer cuatrimestre. De hecho, se hace un propedéutico antes de iniciar la carrera, durante el que se les enseña inglés a los alumnos hasta que lleguen al nivel A2, de acuerdo al marco europeo de ese idioma.

Es un requisito para que puedan comenzar a estudiar, explicó. Luego, en el primer cuatrimestre de la carrera, los estudiantes llevan dos materias en inglés y cuatro en español. En el siguiente, son cuatro materias en inglés y dos en español y a partir del tercer cuatrimestre, todo se hace en inglés.

“Estamos trabajando intensamente para que el 100% de nuestros estudiantes al egresar tengan la certificación del idioma inglés internacional y eso les facilite porque la reforma energética trae toda una serie de cambios que no sólo las empresas mexicanas van a atender los servicios en México, sino hay licitaciones públicas que traen a empresas internacionales”, expuso Elva Gutiérrez, rectora de la Universidad Politécnica de la Energía (UPE) de Tula, Hidalgo.

“Por lo tanto, nosotros tenemos que garantizar que nuestros egresados tengan la certificación en el idioma inglés y es obligatorio, para que sean más competitivos internacionalmente", agregó Gutiérrez.

En la UTR, la primera generación de ingenieros que llevan el modelo BIS concluirá su carrera en agosto de 2016. Actualmente está iniciando el noveno cuatrimestre de sus respectivos estudios en ingeniería.

Patricia Saracho señaló que la regla en la escuela es hablar inglés entre todos y hasta la señalización también está en ese idioma.

Cuando los estudiantes llegan al nivel B2, tienen la posibilidad de aprender un tercer idioma, sea francés, japonés, alemán o portugués.

También tienen una opción de estudiar un cuatrimestre en el extranjero mediante el Programa de Movilidad Estudiantil para perfeccionar aún más el inglés y adquirir mayor experiencia y capacidades, además de conocer otra cultura.

En 2014, 165 estudiantes participaron en este programa en el UTR.

No obstante, para graduarse de un programa técnico superior universitario, los estudiantes deben alcanzar al menos el nivel B2 en inglés, mientras que para las carreras de ingeniería, se requiere el nivel C2.

Por lo tanto, los maestros que imparten las clases deben también tener una calificación superior en inglés, así como una capacitación en las materias que enseñan.

Contenidos en inglés. Carlos Mariaca es profesor en la carrera de Desarrollo de Negocios en la UTR y señaló que tiene licenciatura en Mercadotecnia y un diplomado de enseñanza del inglés, por lo que genera todo el contenido de su materia en ese idioma.

“En mis clases veo interés. Algunos de mis alumnos se han ido de intercambio a Estados Unidos y eso nos ayuda mucho porque traen la pronunciación que adquieren allá y nos ayudan con los que tienen un nivel un poquito menor al que manejan los que ya se fueron”, expuso.

Reconoció que a veces es complicado enseñar en inglés por los términos especializados de la carrera, pues hay que prepararse más de lo normal que para una clase en español, pero “vale la pena porque los alumnos van a salir con un plus que pueden ofrecer al mercado laboral”, además de que pueden posicionarse mejor.

Para Eduardo Padilla, profesor en el departamento de Mecatrónica, afirmó que 70% de sus materias las imparte en inglés debido a que debe explicar algunos conceptos en español, pero tiene el apoyo de un equipo que le ayuda con su material didáctico para garantizar una mejor enseñanza.

“Nos piden un perfil en el sector. Trabajé mucho en empresa y la maestría me ayudó mucho. Además nos piden un examen de inglés cada cuatro meses”, explicó el ingeniero químico y maestro en educación.

Las UT y UP en su mayoría están instaladas en zonas donde no hay otras instituciones de educación superior, lo que permite que la población de mínimo 10 municipios cercanos se vea beneficiada al tener una opción educativa de ese nivel.

“El 50% de los estudiantes vienen de Aguascalientes. En su mayoría son de sectores populares, que vienen de familias que tienen una situación económica media baja. El otro 50% viene del municipio de El Llano", comentó la rectora.

La UTR como las demás universidades tecnológicas y politécnicas es más accesible que otras instituciones de educación superior, por ejemplo en El Retoño la colegiatura es de dos mil 200 pesos por cuatrimestre y la inscripción es de 100 pesos.

"La primera diferencia es el costo. Las universidades tecnológicas están subsidiadas por los gobiernos federal y estatal. Hay muchos esquemas de becas y subsidios para los chavos. La cuota mensual es de 550 pesos, pero esto no significa que lo tienen que pagar porque hay muchos estudiantes que no tienen para pagarlos y entran en un esquema de becas. Se les hace un estudio socioeconómico y hay descuentos hasta de 100%", explicó Saracho Martínez.

Agregó que el modelo BIS de la UT y UP garantiza a los alumnos que el idioma lo va a adquirir en la universidad y no lo tiene que traer de otra educación o por una actividad extraescolar, ya que el inglés va dentro del mismo plan de estudios.

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