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Por segundo día consecutivo, familiares y compañeros de los 43 estudiantes desaparecidos de la Normal Rural de Ayotzinapa, Guerrero, se manifestaron en la Ciudad de México para exigir la inmediata presentación con vida de los jóvenes, así como para protestar contra el aumento al precio de las gasolinas.
Unas 70 personas, la mayoría de ellas encapuchadas, tomaron la gasolinera del grupo Hidrosina ubicada en la esquina de las avenidas Insurgentes y Paseo de la Reforma, donde sustrajeron y regalaron aditivos, aceites, además de invitar a los conductores que pasaban por la zona a cargar gasolina sin pagar.
“A todos los automovilistas les informamos que el combustible de este lugar será gratuito. Invitamos a todos aquellos mexicanos a que pasen a esta gasolinera, a todos aquellos que no tengan gasolina en su tanque, a que pasen. Vamos a hacer justicia de algo que es de ustedes, algo de los impuestos que nos están robando (...).
“¡Porque vivos se los llevaron, vivos los queremos! ¡Ayotzinapa vive, la lucha sigue!”, fueron algunas de las consignas que gritaron al llegar al establecimiento.
Minutos después de iniciados los hechos, empleados del establecimiento cerraron las llaves de abastecimiento de las mangueras. Sin embargo, durante media hora los manifestantes, entre quienes se encontraba Felipe de la Cruz, vocero de los padres de los normalistas desaparecidos, realizaron pintas en la gasolinera exigiendo la presentación con vida de sus compañeros.
Recuento de daños. Al terminar su protesta en la gasolinera, los manifestantes se dirigieron en marcha al Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, ubicado en la calle Serapio Rendón.
El establecimiento permaneció cerrado debido a que los empleados realizaron un recuento de los destrozos ocurridos, mientras que una docena de policías de Tránsito de la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México permaneció en las inmediaciones del negocio.
Esta acción se sumó a la jornada de protesta que realizan en la capital mexicana como medida de presión para que las autoridades mexicanas presenten con vida a los 43 jóvenes normalistas desaparecidos el 26 de septiembre de 2014 en la ciudad de Iguala, Guerrero.
La Secretaría de Seguridad Pública local informó que al lugar se presentaron policías de tránsito, de proximidad y metropolitanos para resguardar el sitio, al tiempo de que realizaron acciones para permitir la vialidad sobre la avenida Insurgentes.
En las inmediaciones del Palacio de Bellas Artes se manifestó otro grupo de 150 integrantes del Consejo Nacional Indigenista, quienes pretendieron llevar a cabo un bloqueo, pero autoridades capitalinas dialogaron con ellos para evitar cortes a la vialidad, por lo que los manifestantes llevaron a cabo un mitin sin afectar la movilidad en la zona.
