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El secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda, tomó protesta a Alejandro Saavedra Hernández, como inspector y contralor general, quien estuvo a cargo de la 35 Zona Militar en Chilpancingo y era jefe del 27 Batallón de Infantería, con sede en Iguala, Guerrero, cuando fueron desaparecidos los 43 normalistas de Ayotzinapa, la noche y madrugada del 26 y 27 de septiembre de 2014.
Saavedra Hernández fue promovido en diciembre de 2014 a comandante de la 9 Región Militar, ubicada en Cumbres de Llano Largo, en Acapulco, Guerrero.
Además de Saavedra Hernández, se promovió a Gilberto Hernández Andreu como subsecretario de la dependencia, y a Daniel Velasco Ramírez, oficial mayor.
Los ascensos se dan a un mes de iniciar el plan de trabajo del mecanismo de seguimiento de la investigación del caso Iguala.
Enrique Gil Botero, relator de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y coordinador del mecanismo, ha confirmado que insistirá en obtener la declaración de soldados del 27 Batallón de Infantería, con sede en Iguala, Guerrero, que estuvieron presentes en esos hechos violentos.
Durante la ceremonia en la que asumieron cargos los nuevos mandos, Noé Sandoval Alcázar, ex subsecretario de la Defensa Nacional, afirmó ante cadetes y oficiales reunidos en la explanada del Heroico Colegio Militar, que el Ejército es la última línea de defensa que garantiza la paz, la tranquilidad y la seguridad de la sociedad.
En su último discurso como militar en activo, aseguró que aquello que distingue a los soldados de otros servidores es que trabajan para la sociedad con convicción y voluntad en múltiples tareas, incluso en aquellas sin marco jurídico, como la seguridad pública.
“No existe mayor satisfacción que servir a los demás; servir al pueblo de México ha sido nuestra mayor recompensa. Lo que nos distingue a los soldados [de otros servidores públicos] es que trabajamos con convicción y voluntad para la sociedad, nosotros estamos entre los que servimos al pueblo de México en cualquier situación y circunstancia, por difícil que ésta sea”, recordó.
Hizo un reconocimiento a los elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional que perdieron la vida en cumplimiento de su deber y expresó su apoyo y respaldo a las familias de las víctimas. Las esposas e hijos de los generales, invitadas de honor, aplaudieron.
“En esa lucha compañeros nuestros han sacrificado hasta la propia vida, pues somos la última línea de defensa que garantiza la paz, la tranquilidad y la seguridad del pueblo de México; en pocas palabras, representamos la grandeza de nuestro País y esa es la satisfacción del deber cumplido”, destacó.
En el acto, Salvador Cienfuegos Zepeda dijo que “la razón que hoy nos convoca es reconocer la brillante trayectoria de destacados generales, quienes con honor, lealtad, entrega y compromiso, ofrendaron la mayor parte de su vida al servicio de México y de las Fuerzas Armadas, y quienes hoy pasan a la honrosa situación de retiro.
“Sé que entre tesoros más valiosos guardan las expresiones de afecto y de cariño de sus seres queridos, por el orgullo de tener a un soldado como esposo, como padre o como hijo. No se nos olvide, seguimos siendo soldados”, destacó Cienfuegos Zepeda, quien les dijo que sus huellas marcaron la institución.
Además de Sandoval Alcazar, pasaron a situación de retiro los generales Augusto Moisés García Ochoa, Tomás Jaime Aguirre Cervantes, Genaro Fausto Lozano Espinosa, Miguel Gustavo González Cruz y Sergio Arturo García Aragón, quienes cumplieron entre 46 y 49 años de servicio.
