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politica@eluniversal.com.mx
Washington.— La Agencia Antinarcóticos de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) consideró a Joaquín El Chapo Guzmán como el “más peligroso traficante de heroína en el mundo” y lo responsabilizó por el contrabando y distribución de drogas que hoy se encuentran “en cada esquina” de la Unión Americana, por lo que ofrece una recompensa de 5 millones de dólares a quien dé información sobre su paradero, una cifra superior a la que fijó el gobierno de México por la captura del líder del Cártel de Sinaloa.
En una audiencia para poner de relieve la amenaza epidémica de la heroína en Estados Unidos, que llega en su mayoría desde México, el jefe de operaciones de la DEA, Jack Riley, puso énfasis en el papel que sigue teniendo el narcotraficante mexicano en el contrabando y distribución de heroína que ha crecido de forma exponencial en territorio estadounidense.
“En los últimos años hemos visto un aumento en el cultivo de la amapola y la producción de heroína en México. Como resultado, la heroína mexicana representa aproximadamente la mitad de la oferta interna en Estados Unidos”, dijo Riley.
“El Chapo Guzmán, el más peligroso traficante de heroína en el mundo, y su Cártel de Sinaloa controlan el mercado [estadounidense] de la heroína”, añadió el jefe de operaciones de la DEA quien, hace menos de dos semanas, prometió “hacer todo lo posible” para recapturar al narcotraficante tras su fuga a través de un túnel de la cárcel de máxima seguridad de El Altiplano, en el Estado de México.
“El papel de la delincuencia organizada mexicana no tiene precedentes [en el tráfico de heroína], por lo que la relación de la DEA con nuestras contrapartes mexicanas, y nuestra presencia a lo largo de la frontera es tan vital”, enfatizó Riley en alusión al reforzamiento sin precedentes de la cooperación entre ambos países.
Apenas el pasado 13 de julio, la DEA decidió actualizar su lista de “fugitivos internacionales más buscados”, con la incorporación de dos de las más recientes fotografías de Guzmán Loera y activó la vieja recompensa de 5 millones de dólares que se ofrece a quienes aporten cualquier indicio o información que conduzca a su captura.
Las fotos que subió en su actualización la DEA corresponden al momento en que el líder del Cártel de Sinaloa fue detenido el 22 de febrero de 2014 en Mazatlán, y la segunda, sin bigote y sin cabello, obtenida a los pocos días, luego de que ingresó y fue fichado en la cárcel de máxima seguridad de El Altiplano.
De forma simultánea, el gobierno de México ofreció una recompensa de 60 millones de pesos —3.8 millones de dólares, aproximadamente— a todos aquellos que proporcionaran información “que auxilie eficientemente a la localización y detención de Joaquín Guzmán Loera”.
El control del mercado. En la audiencia que se realizó ante el Comité Judicial de la Cámara de Representantes, Riley destacó el papel predominante del Cártel de Sinaloa en el tráfico de heroína que “hoy se encuentra en cada esquina de nuestras ciudades y en lugares que nunca antes habíamos detectado.
“La colaboración entre los cárteles de narcotraficantes mexicanos y las pandillas en Estados Unidos es hoy más peligrosa y tóxica que nunca”, aseguró Riley, al advertir que la penetración de la heroína se ha producido a través de estas redes para inundar el mercado con un producto más puro, más barato y más peligroso.
“La heroína destruye a los individuos, a las familias y a comunidades. La gran mayoría de la heroína que se consume en Estados Unidos se fabrica fuera de nuestro país y entra de contrabando a través de nuestra frontera sur”, añadió Riley, para apuntar así al narcotraficante mexicano como el responsable de una crisis sin precedentes en los últimos 30 años.
En este sentido, Riley expuso ante miembros del Comité Judicial la peligrosidad no sólo de un narcotraficante como El Chapo Guzmán, sino su alianza con las pandillas y su vieja creencia de que podrá operar como siempre para asegurarse ganancias millonarias con el tráfico de la heroína.
“Yo les puedo asegurar que El Chapo Guzmán sigue creyendo que los policías seguimos sin comunicarnos entre nosotros; que los buenos no estamos compartiendo información. Pero hoy les puedo decir que lo estamos haciendo mejor que nunca. Atando cabos para extender nuestra efectividad en toda la nación para hacerles frente”, dijo para dejar en claro que reducir al máximo la capacidad del Cártel de Sinaloa en Estados Unidos será una de las prioridades de la DEA.