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politica@eluniversal.com.mx
La organización Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad, que preside Claudio X. González Guajardo, dio a conocer una investigación que sostiene que la Presidencia de México —durante la gestión de Felipe Calderón— y Pemex han sido involucradas en la investigación del caso “Lava Jato”, en Brasil, sobre los sobornos que la firma constructora internacional Odebrecht repartió en países de América Latina y en dos naciones africanas para obtener contratos por miles de millones de dólares.
Según la organización, una de las evidencias que implica al gobierno mexicano es un correo electrónico entre Roberto Prisco Ramos y Alexandro Alencar, ambos funcionarios de Odebrecht, en el que se detallan los preparativos para una reunión entre los entonces presidentes de México, Felipe Calderón, y de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva “como parte de su estrategia de negocios con Pemex.
En la investigación “La conexión Odebrecht-Los Pinos, en tiempos de Calderón”, Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad asegura haber tenido acceso a un expediente en el que se da cuenta de la comunicación entre los dos ejecutivos de la firma.
Añade que “este mensaje ha sido considerado una prueba relevante por el juez brasileño Sergio Moro en una línea de investigación contra Lula por presuntamente haberse prestado a los intereses de Odebrecht usando su investidura como presidente de Brasil”.
La organización detalla que los datos ya habían sido revelados el 1 de abril de 2016 por la revista brasileña Época.
Por medio de una carta y un cuestionario respondido a Mexicanos contra la Corrupción, el ex presidente Felipe Calderón dijo que es “absurdo” que hubiera aceptado reunirse con el ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva impulsado por los ejecutivos de Braskem, la empresa petroquímica del grupo Odebrecht.
En su carta, Calderón asegura que “en ningún caso las reuniones con el presidente de Brasil con inversionistas implicaron acuerdos al margen de la ley o que les confiriesen ventajas indebidas a éstos. En todo momento se veló por interés superior de México y el respeto irrestricto al Estado de derecho. Por supuesto, la sola insinuación de soborno hubiera sido inaceptable”.
El reporte de la organización destaca que el ex presidente Lula ha negado la acusación por medio de sus abogados. “No obstante, la indagatoria continúa abierta y ese correo es una de las pruebas en su contra”, detalla.
La constructora Odebrecht aceptó en diciembre de 2016 el pago de sobornos a cambio de contratos, ante las investigaciones del Departamento de Justicia de Estados Unidos sobre la utilización del sistema bancario estadounidense para realizar operaciones de lavado de dinero. La empresa brasileña accedió ante las autoridades de EU al pago de 3 mil 500 millones de dólares en multas.
La justicia de EU había descubierto que Odebrecht utilizó una unidad de negocios oculta, a la que calificó como “departamento de sobornos” para el pago de aproximadamente 788 millones de dólares a funcionarios corruptos en al menos 12 países de América Latina y África, por obtener contratos de gobierno para obras de infraestructura.
A partir de las indagatorias en Estados Unidos y la Fiscalía de Brasil, se conoció que el nombre de un funcionario de Pemex aparece en las investigaciones como alguien que supuestamente recibió sobornos de la constructora en octubre de 2013 por más de 10 millones de dólares, a cambio de contratos en México. El nombre del servidor público se dará a conocer el último día de mayo, conforme a las actuaciones judiciales en Brasil.
Actualmente, países de América Latina —incluido México— realizan una investigación multinacional sobre el modus operandi de la constructora brasileña en 11 países del continente. Hasta el momento, 77 testigos colaboradores han puesto al descubierto la red de sobornos de Odebrecht.
En México, el caso está en manos de la Procuraduría General de la República y de la Secretaría de la Función Pública.