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El gobernador de Morelos y presidente de la Confederación Nacional de Gobernadores (Conago), Graco Ramírez, visitó ayer la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para mostrar el rechazo de los gobernadores mexicanos a las políticas antiinmigrantes del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Ramírez también habló sobre la reciente visita que el presidente de Morena, Andrés Manuel López Obrador, realizó a la CIDH, y advirtió que la unión de Trump y una victoria de AMLO en las elecciones de 2018 serían “la tormenta perfecta”.
Se reunió con el presidente de la CIDH, Francisco Eguiguren; la vicepresidenta y relatora por México, Esmeralda Arosemena de Troitiño, y el secretario ejecutivo del organismo, Paulo Abrao, a quienes entregó una carta en la que la Conago muestra su “respaldo” al posicionamiento del organismo contra la vulneración de los derechos humanos y los estándares interamericanos con los migrantes.
“Le comentamos que la comisión está muy atenta a este tema”, dijo Eguiguren a la salida del encuentro con Ramírez.
La CIDH, que está en pleno periodo de sesiones, tenía prevista una audiencia de oficio sobre las órdenes ejecutivas de Estados Unidos que se celebrará el próximo martes.
La “reunión informativa” entre Conago y la CIDH sirvió para que ambos organismos acordaran colaborar y para “dar seguimiento y recibiendo” información. “Estamos en relación con ellos”, aseguró Ramírez,quien se comprometió a tener colaboraciones futuras en caso de necesitar acreditar casos.
Mencionó casos paradigmático de deportaciones como los de los mexicanos Guadalupe García de Rayos y el dreamer Daniel Ramírez.
El presidente de la Conago informó a la CIDH del compromiso de los gobernadores en dar apoyo jurídico a los connacionales en territorio estadounidense. En ese sentido, Eguiguren destacó la “influencia” que la Conago está generando en la “relación bilateral para generar mejores condiciones en la defensa de los migrantes”.
Antes de la reunión y la presentación de la carta, el gobernador quiso remarcar la diferencia entre su presencia en la CIDH con la del líder de Morena, Andrés Manuel López Obrador, quien esta semana también acudió al organismo para pedir que aplique medidas cautelares contra los decretos del presidente Trump.
Para Ramírez el acto de López Obrador fue político. “No vengo a hacer campaña”, aseguró el gobernador y dijo que el tabasqueño no fue recibido por los altos cargos de la CIDH debido a su voluntad electoral.
“La comisión no recibió con altos funcionarios a López Obrador porque es una declaración genérica que quiere tener más un efecto político que ayudar a México”, explicó.
El líder de Morena entregó su denuncia a personal del área técnica, como marca la normativa. El presidente de la Conago, quien se reunió para establecer contacto y mostrar apoyo, no presentó ninguna petición de medida legal.
Ramírez afirmó que la visita de López Obrador en Washington fue la de un “hombre con obsesiones y sin experiencia en política exterior” y puso como ejemplo que culpó al Ejército del caso Ayotzinapa.
“Si [López Obrador] fuera presidente, sería comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, y viene a hablar mal del Ejército en EU... era más importante hablar de defender a los migrantes y no su agenda”, dijo.
Por eso, el presidente de la Conago aseguró que la unión de Trump y una hipotética victoria de AMLO en 2018 serían “la tormenta perfecta”.
