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politica@eluniversal.com.mx
El regreso de Luis Videgaray al gabinete como secretario de Relaciones Exteriores lo coloca de nuevo en los reflectores con vistas a la sucesión en 2018, coincidieron los politólogos José Antonio Crespo, José Luis Valdés Ugalde y Alberto Aziz Nassif.
El director del Instituto México del Woodrow Wilson Center, Duncan Wood, dijo que Videgaray Caso es el “hombre adecuado” para el momento actual de la relación México-Estados Unidos, porque es una figura respetada por Donald Trump. Agregó que se ha mostrado como un político que sabe negociar muy bien.
Para los analistas mexicanos no basta su reaparición, sino su comportamiento para que pueda hablarse de que queda posicionado para una eventual postulación, coincidieron.
Valdés Ugalde, politólogo e internacionalista de la UNAM, pidió no hacer futurismo político, pero reconoció que “el trumpismo en México pone a prueba a todos, a la clase política y la transición hacia 2018 en definitiva, y de eso Videgaray no va a ser la excepción, es un miembro actuante muy poderoso, cercano al presidente”.
Dijo que el reto “es si va a responder Videgaray a los mexicanos o va a responder en función de sus intereses personales”, valoró y de eso dependerá su papel en el futuro”.
Para el politólogo Crespo, al reintegrarse al gabinete el nuevo canciller “tiene una oportunidad y puede seguir jugando en la sucesión”, pero tendría que tener resultados “que por lo menos sean aceptables” para contar con credenciales con las cuales se pudiera justificar su candidatura dentro del PRI.
“No hay garantía de que vaya a serlo, yo sí creo que es la preferencia de Peña, pero no puede postularlo porque sí. Tiene que dar resultados y aun así hay otros factores como la reacción del PRI”, señaló.
Además, hizo notar los problemas que tienen otros presidenciables, como los secretarios de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong (en seguridad), y de Educación, Aurelio Nuño.
El académico Víctor Alarcón, de la UAM, consideró que con este nombramiento el Presidente “reventó” la unidad que existía en el PRI.
“El presidente Peña Nieto revienta la poca unidad que todavía había en el PRI, incluso pone un distanciamiento y hace una ruptura implícita con Carlos Salinas de Gortari al desplazar a su sobrina de la Cancillería, y de manera ominosa lo había hecho con la visita que organizó Videgaray de Trump al interferir con las atribuciones de la propia canciller”.
El profesor del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), Aziz Nassif dijo que Videgaray Caso es sólo un posible aspirante, pero su fuerza está por verse: “Si le llegara a ir medianamente bien, sí se llegaría a fortalecer”, pero lograrlo implicará sacar beneficios para México frente a una política totalmente adversa como lo anticipa Trump.
Con ese escenario, el PRI tendrá más complicaciones, pese a que Videgaray sea carta fuerte, el tricolor está “de capa caída, la corrupción, la situación económica y eso no los posiciona de la mejor forma para la sucesiónl”, valoró Aziz Nassif.