Ante el cambio de gobierno en Estados Unidos y la toma de protesta de Donald Trump como presidente de aquel país, el líder nacional de Morena, Andrés Manuel López Obrador, cambió el tono de su discurso y, ahora, llamó al presidente Enrique Peña Nieto y a otras fuerzas políticas del país a suscribir un Acuerdo de Unidad Nacional en defensa de los derechos de los migrantes y de los intereses superiores de México.
En Ciudad Acuña, Coahuila, el presidente partidista planteó un decálogo como respuesta al primer mensaje que envío Trump como presidente de EU.
“En ejercicio pleno de nuestra independencia debe ponerse en práctica un plan de emergencia nacional para enfrentar los daños y revertir la política proteccionista anunciada por Donald Trump”, indicó.
El decálogo, a manera de plan de acción, que puso sobre la mesa López Obrador se hará llegar hoy mismo al presidente Enrique Peña Nieto.
“Al mismo tiempo, sostenemos que de aprobarse este plan estaremos dispuestos a participar y a suscribir, junto con otras organizaciones políticas y sociales, con los sectores económicos, civiles y los intelectuales del país, un Acuerdo de Unidad Nacional en Defensa de los Derechos de los Migrantes y de los intereses superiores de México”, sostuvo.
Asimismo anunció una gira en los próximos 100 días por ciudades de Estados Unidos.
“Vamos al encuentro franco y generoso con ciudadanos del país vecino, con pobladores de origen mexicano y de otras nacionalidades. Empezaremos a tener estos encuentros el 12 de febrero en Los Ángeles y, posteriormente, estaremos en Chicago, Phoenix, El Paso, New York, Laredo y San Francisco”, detalló.
Además Morena, dispondrá de 100 abogados y traductores en todas las ciudades fronterizas para iniciar la defensa jurídica de migrantes, así como acudir a instancias internacionales para demandar justicia y defender el principio moral de la fraternidad.
“Bajo estas consideraciones es que actuaremos en defensa de los derechos humanos de nuestros paisanos y de todos los migrantes del mundo. Esto implica la oposición a la creación del muro, a las deportaciones y a la toma de decisiones unilaterales y prepotentes en materia de libre comercio”, dijo.
El plan de acción a manera de decálogo es el siguiente:
1.- Se propondrá a Enrique Peña Nieto, que hoy mismo solicite una reunión urgente con el presidente de Estados Unidos, para hacer valer los derechos humanos y conducir y atender personalmente este asunto de interés nacional.
2.- Convertir los consulados de México en Estados Unidos en procuradurías de la defensa de los migrantes.
3.- Basta de pasividad. Hay que tomar la iniciativa y ante la amenaza y el manejo perverso de la política de la incertidumbre, fijar una postura con claridad sin titubeos ni medias tintas. Tenemos derecho a poner nosotros la Agenda sobre la mesa. No se trata de responder a la prepotencia con balandronadas, tampoco es enfrentarse con Sansón a las patadas o de aplicar la bella y conmovedora historia de David contra Goliat, es sencillamente ejercer con orgullo nuestra soberanía y actuar con arrojo y determinación.
4.- En ejercicio pleno de nuestra independencia debe ponerse en práctica un plan de emergencia nacional para enfrentar los daños y revertir la política proteccionista anunciada por Donald Trump.
5.- Este plan debe contemplar, entre otras medidas, el apoyo a la producción nacional, la creación de empleos en México y el fortalecimiento del mercado interno; la reactivación de la industria de la construcción; la utilización del sector energético como palanca del desarrollo nacional, la construcción de refinerías para no comprar las gasolinas y otros combustibles en el extranjero. También hay que rescatar el campo y apoyar a los productores; deben fijarse precios de garantía para los cultivos y alimentos básicos (maíz, frijol, arroz, trigo, leche, huevo, pollo, carne de res, entre otros). Debe lograrse en el corto plazo la autosuficiencia alimentaria, producir en México lo que consumimos.
6.- Promover un acuerdo bilateral específico con Canadá para ampliar la contratación de trabajadores mexicanos en ese país y suscribir compromisos para lograr una mayor inversión de las empresas mineras canadienses en México, con salarios justos y cuidado del medio ambiente.
7.- Aplicar un programa de apoyo a la inversión, al comercio, a la creación de empleo y el bienestar a lo largo de los tres mil kilómetros de frontera, que contemple bajar impuestos, reducir el costo de las gasolinas, el diésel, el gas y la electricidad, así como el traslado de las aduanas mexicanas 20 kilómetros de la línea divisoria hacia adentro de nuestro territorio. Ante la posible modificación de aranceles y aumentos de impuestos en Estados Unidos a quienes exportan a ese país, debemos contemplar una zona libre o franca que beneficie a las ciudades fronterizas de México.
8.- Diversificar las relaciones económicas y comerciales. Hay que aprender la lección, no se pueden poner todos los huevos en una sola canasta, debemos promover la inversión, el financiamiento y el comercio con todos los países del mundo.
9.- Acudir a instancias internacionales, como la organización mundial del comercio, ante posibles modificaciones arbitrarias en impuestos y aranceles que perjudiquen a las empresas instaladas en México.
10.- Para financiar el plan de emergencia nacional pondremos a consideración del gobierno federal una estrategia de austeridad republicana y ahorrar 360 mil millones de pesos, acabando con la corrupción, con los privilegios de los altos funcionarios y el derroche del gasto público.