Más Información
Rosa Icela Rodríguez se reúne con próximo titular del INM; “arrancaremos el 2025 con mucho trabajo”, asegura
SSa llama a tomar medidas preventivas ante bajas temperaturas; pide proteger salud por temporada invernal
Oposición tunde diseño de boletas de elección judicial; “la lista definitiva la harán Monreal y Adán Augusto”, dice Döring
Padres de normalistas de Ayotzinapa marchan a la Basílica de Guadalupe; exigen cárcel para los responsables
3 de cada 10 veces que se vende bacalao en México es carne de otras especies: ONG; llaman a CONAPESCA a rastrear productos
politica@eluniversal.com.mx
La ex gobernadora de Yucatán Ivonne Ortega, hoy diputada federal del PRI, afirma que es legítima su aspiración a la candidatura presidencial de su partido en 2018.
En entrevista con EL UNIVERSAL, dice no sentirse en desventaja frente a otros aspirantes del partido como Miguel Ángel Osorio, Luis Videgaray o Aurelio Nuño, y destaca que hay una serie de perfiles valiosos.
“Es a lo que he decidido dedicar mi vida, creo que es legítima esa aspiración”, explica sobre sus intenciones presidenciales.
Acepta, empero, que hoy “es difícil ser priísta”, ante la situación que vive el país, pero se dice confiada de que el PRI mantendrá la Presidencia de la República en la cita electoral de 2018.
De los actos de corrupción de los que se acusa a ex gobernadores de su partido, justifica que el tricolor gobernaba más estados hace unos años, y de ahí el alto número.
Ortega Pacheco solicita, sin embargo, no cobrarle los platos rotos que no le corresponden al partido.
“Es difícil también ser priísta en el PRI, pero no por ser difícil vamos a dejar de hacerlo. La ideología del partido es una buena ideología, es una en que muchos creemos y aplicamos, y no podemos pagar platos que no rompemos. Si hay quienes cometieron errores, que se les castigue”, señala.
Ve a Andrés Manuel López Obrador, presidente de Morena, como el más adelantado por parte de otros partidos para las elecciones presidenciales.
De su plataforma, “Hazlo por México”, la cual lanzó el lunes en internet, reconoce que puede servirle para escuchar a la gente rumbo a las elecciones de 2018, para lo cual esperará los tiempos de su partido.
Reconoce que hay inconformidad en la gente por el gasolinazo y considera que el acuerdo firmado el lunes no es suficiente. Se pronuncia a favor de analizar reducir el impuesto al combustible, y revisar el gasto a la baja, para aminorar el impacto a las familias.
Ortega acepta que la liberalización de la gasolina fue una decisión “no suficientemente evaluada”.
De las respuestas que emitió en video al presidente Enrique Peña Nieto, a la pregunta de: “¿Ustedes qué hubieran hecho?”, expone que probablemente el PRI no hizo suficiente en austeridad, “porque no veíamos el escenario que hoy se vive”.
Pide sacrificar proyectos, por lo cual no podría pasar gran cosa, pero sí pasará “si seguimos cargándole la mano al gasto de las familias”.
Acepta que hoy los casos de corrupción están en todos los partidos. Dice tener las manos limpias y para su plataforma “Hazlo por México” aceptará donaciones para recorrer el país.
“No me siento en desventaja”
¿El lanzamiento de “Hazlo por México” es una intención clara de decir dentro del PRI ‘quiero pelear por la candidatura presidencial de mi partido’?
—Lo he dicho. Tengo la aspiración a ser candidata a la Presidencia de la República, pero “Hazlo por México” es todavía más alto, digamos, que la propia aspiración personal es tratar de hacer entender a los mexicanos que está en nosotros poder cambiar las condiciones, ¿cómo lo podemos hacer?, tomando acción en nuestro entorno.
Esto me va a permitir conocer muchos de los problemas que tiene nuestro país, que es una de las cosas que he acostumbrado, que cuando aspiro a tener un cargo me gusta tener y sentir lo que la gente siente.
“Hazlo por México” es por mi pequeño motor, mi hijo Álvaro Humberto, que es a la generación que le quiero heredar.
¿Le va a servir esta plataforma para las elecciones de 2018?
—Para el conocimiento y para el recorrido sí, pero digamos que no es el motivo principal de haberla formado, sino mi hijo que todavía está empezando a hablar, tiene tres años.
Tengo que esperar los tiempos y las condiciones que el partido marque, pero también tengo que estar en acción, cómo vamos a hacer las cosas. Ya estamos haciéndolo.
¿Es legítima esta aspiración a la Presidencia de la República?
—Sí, ya fui presidenta municipal, diputada local y federal, senadora, gobernadora, secretaria general del PRI, es a lo que he decidido dedicar mi vida, creo que es legítima esa aspiración.
¿De dónde va a salir el dinero para esos recorridos?
—Obviamente, mi traslado de mis propios recursos, la idea que tenemos es que haya gente que vaya aportando.
¿Se siente en desventaja frente a otros aspirantes del PRI como Osorio Chong o Luis Videgaray?
—En el partido hay una riqueza de perfiles y vamos a elegir en su momento al mejor. Nunca me he sentido en desventaja, mi formación es en la oposición. Yo creo que la sociedad valora a la persona, lo que propones, lo que has hecho, cómo has actuado, qué tan congruente eres con tus actos. En 10 años competí nueve veces y en ninguna de las veces el PRI me dio la candidatura, me hicieron competir.
¿Si no le favorece la decisión, buscaría usted la candidatura Presidencial independiente en 2018?
—Yo creo que primero habría que esperar para ver cuál es la convocatoria del PRI. Saber qué es lo que va a decidir el Consejo Político, de cómo va a decidir a su candidato.
Que sea un candidato que, primero, lo quieran las estructuras y que también en consecuencia, además de las estructuras, hoy ya no es suficiente el voto duro que tiene un partido, no sólo el PRI sino todos, ya no es tan duro. Debes tener el apoyo de la sociedad.
¿Pero no descartaría en un momento dado competir con una candidatura independiente?
—Yo quisiera esperar la convocatoria del partido y saber cuáles son los mecanismos para sacar la mejor opción.
¿Hoy en día no es difícil ser priísta? Con un país con bajo crecimiento económico, con un gasolinazo que tiene a la gente protestando en las calles, con gobernadores acusados de corrupción… ¿A qué ir a 2018 con este partido?
—En el caso de los gobernadores me gustaría hacer una acotación. Es el mayor número de mandatarios señalados, porque éramos el partido que tenía el mayor número de gubernaturas. Pero quiero preguntarte eso el próximo año. Teníamos 20 gobernadores, ahora serán 15, y hoy proporcionalmente no tenemos la mayoría. No justifica los actos de corrupción, tienen que ser castigados quienes sean, del partido que sean, del apellido que sea y del nivel que fuera. Lo digo en las propuestas de mi plataforma.
¿Pero a qué ir a 2018, vale la pena, con un PRI a la baja? Con un gobierno con las más bajas calificaciones de los cuatro años, insisto, no hay crecimiento, hay corrupción...
—Lo mismo me decían como gobernadora, “¿a qué vas a buscar la candidatura? tienes 33 años, espérate seis para que puedas mejorar las condiciones”. Yo decidí que era mi momento.
Hoy me preguntas “¿a qué voy?”, precisamente a eso, primero a rescatar a la estructura del PRI, a buscar a los verdaderos priístas que quieren trabajar. A tratar de ganar esta confianza.
¿Ve condiciones para que el PRI pueda repetir la Presidencia en 2018, bajo este escenario?
—Por supuesto.
¿Por qué los políticos no son autocríticos? Acá se ha sentado gente del PAN y del PRD, y nunca aceptan... ¿por qué no aceptar a la pregunta de si es difícil ser priísta en este momento?
—Sí, dije que sí es difícil.
Por qué no decir “es muy complicado ser parte del partido que tiene tan descontento a todo el país...”
—De hecho tengo un foro en el que digo que es difícil ser mexicano en México. Es difícil también ser priísta en el PRI, pero no por ser difícil vamos a dejar de hacerlo. La ideología del partido es una buena ideología, es una en que muchos creemos y aplicamos, y no podemos pagar platos que no rompemos. Si hay quienes cometieron errores que se castiguen. En el PRI, en el PAN, en el PRD, porque al final de cuentas es la política en general.
Yo sí he sido autocrítica, yo reconozco que está en una condición muy difícil, pero también reconozco que la única manera de cambiar es tomando acción. Si no tomamos acción, nadie va a venir a salvarnos a nosotros mismos.
De la oposición, ¿a quién ve como puntero para 2018?, ¿a quién tiene que ponerle la mira el PRI para contrarrestarlo?
—Es muy temprano todavía para decir este es el puntero. Igual aún falta que salga alguno. Puede ser. El que yo considero con claridad —porque se creó el partido para que pudiera ser el candidato— es Andrés Manuel López Obrador, aunque ahorita sería muy temprano.
¿Tiene las manos limpias?
—Y estoy a las pruebas que sean. Hice mi declaración 3de3, le autoricé al Instituto Mexicano para la Competitividad A.C. (Imco) que fuera pública. Digo la verdad, lo que tengo lo tengo de lo que trabajo, que no son los cargos públicos que he tenido. Vivo como casi todos, lo que tengo es lo que puedo pagar.
Respuestas al Presidente
Usted responde en video al presidente Enrique Peña qué podría hacer hoy. ¿Por qué no lo hizo cuando fue el momento de hacerlo, es decir, la reforma energética, y cuando aprobaron el presupuesto 2017?
—Lo de la reforma energética todavía no estaba en la Legislatura, era secretaria general de mi partido.
Pero esta condición que estamos viviendo no tiene que ver con la reforma energética. Donde sí voté fue en adelantar la apertura de la liberación de la gasolina.
Valoré mi voto y cuestioné algunas cosas a la Secretaría de Hacienda y en ese momento no se veía el impacto de lo que hoy se está viviendo con los ciudadanos, por eso es que cuando el presidente Peña Nieto nos invita a que opinemos y nos pregunta: “¿Ustedes qué harían?”, yo hago un análisis, en este momento de 10 propuestas, tengo un sitio que se llama ustedesqueharian.mx, en donde la gente está opinando.
En las propuestas, parte importante es reducir gastos público, son cosas que los diputados no solamente del PRI, de todos los partidos, debieron haber previsto, porque era un año complicado.
—Bueno, se previó en el presupuesto. Es un presupuesto bastante castigado y las demandas de la sociedad son muchas. En uno de los puntos yo comento, si nosotros revisamos el precio, la estructura del precio de la gasolina, podemos revisar que pagamos dos impuestos, por lo menos revisemos la posibilidad de uno, del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) para que, si disminuimos por lo menos 50% el IEPS o lo quitamos, buscamos en otras áreas que hoy están siendo beneficiadas, como el turismo o la minería.
¿Hizo el PRI lo suficiente para que hubiera austeridad?
—Probablemente no, porque no veíamos el escenario que hoy se vive. Ahorita, precisamente, digo “revisemos”. Todo es revisable: gastos en eventos públicos, en ceremonias, en traslados aéreos y terrestres, en el gasto del combustible, cosas que puedan impactar lo menos posible a los mexicanos.
Políticos y burocracia gozan de vales de gasolina, tienen bonos secretos, como reveló EL UNIVERSAL. ¿Esto no incentiva este coraje en las calles, y pone en duda a la clase política, cuando argumenta a favor del aumento a la gasolina?
—Por supuesto. De hecho, cuando sale el bono secreto, en ese momento lo rechacé. Por convicción personal, yo no utilizo el servicio de gastos médicos que da la Cámara, también lo hice en la Legislatura anterior. Cuando tengo algún cargo de elección popular, que han sido varios, he acostumbrado donar 50% de mi salario, porque creo que lo que te mueve a tener un cargo es poder cambiar la realidad de tu entorno.
¿Fue un error el procedimiento para liberalizar la gasolina?
—Creo que fue una condición no suficientemente evaluada.
¿Ese pacto no alcanza?
—Creo que es un buen esfuerzo, una voluntad de muchos, todavía falta. Sacrificar algún proyecto, a lo mejor, este año no pasa gran cosa y sí pasa si seguimos cargándole la mano al gasto de las familias. En el PRI hay muchas visiones. La mía es una. Estamos dando opiniones diferentes en las que creemos que se deben tomar, porque, eso sí, estamos en la calle, nosotros sí estamos escuchando lo que las personas nos están diciendo y la gente está verdaderamente enojada con esta condición, porque le pega donde no le puedes pegar, que es al bolsillo.