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Oaxaca, Oax.— Después de realizar una marcha, que inició en la Fuente de las Ocho Regiones de la ciudad de Oaxaca, maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) se confrontaron con la policía estatal al intentar ingresar al Zócalo —que era resguardado por agentes y vallas para permitir los festejos patrios—, donde pretendían realizar su “grito popular”.

En el lugar al menos 20 personas resultaron con lesiones, denunciaron activistas y maestros disidentes. El gobierno del estado emitió un comunicado en el que condenó los hechos de violencia “provocados por un grupo minoritario de trabajadores de la educación agremiados a la Sección 22, estudiantes normalistas y miembros de organizaciones adherentes al gremio magisterial”.

Informó que el primer ataque ocurrió alrededor de las 20:05 horas, cuando el contingente intentó penetrar al perímetro del Zócalo “lanzando proyectiles y cohetones en contra de elementos de la policía estatal que se encontraban vigilando el acceso de la ciudadanía”.

Ante esa situación, el gobierno dijo que la policía repelió la agresión y dispersó “al grupo radical de manifestantes, integrado por aproximadamente 600 personas, que de acuerdo con un reporte preliminar pertenecen a la Sección 22 de la CNTE, estudiantes normalistas y miembros de organizaciones sociales afines”.

Añadió que el incidente dejó como saldo dos elementos de seguridad pública heridos por cohetón, de nombres Roque González González y Aldahir García Reyes, pertenecientes a la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca (SSPO), quienes presentaron quemaduras en brazos, pecho y cara. Además, un civil presentó lesiones leves, por lo que fue trasladado al Hospital Regional del ISSSTE para su valoración y atención médica.

Según el reporte oficial, en el operativo de seguridad participaron dos mil elementos desarmados, quienes portaron equipo táctico y escudos de protección, con el apoyo de 50 vehículos motorizados.

El magisterio acusó a policías armados, pertrechados desde el Palacio de Gobierno. Por lo menos en tres momentos hubo intercambio de proyectiles, cohetones y cartuchos de gases lacrimógenos, incluso minutos antes del Grito de Independencia.

Mientras que en Chilpancingo, Guerrero, maestros, normalistas de Ayotzinapa, militantes de organizaciones y padres de familia de los 43 fueron bloqueados por policías antimotines, en su intento por llegar al palacio de gobierno.

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