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Tlaxcala.— De acuerdo con el Programa de Resultados Preliminares (PREP) en la entidad, Marco Antonio Mena, candidato de la coalición integrada por PRI, PVEM, Panal y Partido Socialista, aventajaba en la elección para gobernador con 23.5% de casillas computadas.
Después de las 03:00 horas de ayer, acumulaba el priísta 33% de los votos, con 40 mil 867 sufragios, seguido de su contrincante Lorena Cuéllar, del PRD y PT, con 36 mil 360 sufragios (29.38%); la abanderada del PAN Adriana Dávila llevaba 18.76%.
En la medición preliminar para diputados, el PREP sólo tenía registros de 13 de los 15 distritos locales electorales. En cinco de ellos el PRI iba a la cabeza, en otros el PAN con número igual, en tanto que el PRD llevaba la delantera en dos y el Partido Alianza Ciudadana un distrito electoral.
Cerca de medianoche, la senadora Dolores Padierna, del PRD, irrumpió en el Consejo del Instituto Tlaxcalteca de Elecciones y acusó a los consejeros de ser lacayos del gobernador priísta Mariano González Zarur. Aseguró que los consejeros manipulan el PREP para hacer ganar al candidato del PRI.
Para esta elección el Instituto Tlaxcalteca de Elecciones (ITE) ordenó la instalación de mil 501 casillas electorales, que corresponden a 605 casillas básicas, 870 contiguas, 11 extras y 15 especiales, de las cuales 14 fueron desactivadas por falta de seguridad.
Turismo electoral. De las 15 casillas, cuatro no fueron instaladas y 10 fueron suspendidas por presunto “turismo electoral”. Sólo funcionó una especial en la capital del estado.
En estas casillas hubo largas filas de votantes, quienes desde la noche anterior durmieron en la calle para votar a primera hora de la jornada.
En un recorrido que realizó EL UNIVERSAL la noche del sábado se pudo observar a personas durmiendo en la calle; al ser interrogadas por las autoridades estatales dijeron no saber de qué estado venían, y cuando les solicitaron su credencial de elector, uno de ellos respondió: “No tengo por qué [mostrarla]; no estamos haciendo nada malo”.
Por la mañana del domingo, en otro recorrido realizado por este diario fue posible observar largas filas, inusuales, de gente formada para votar en las casillas especiales.
Hacia las 15:00 horas, el presidente del Consejo local del INE, Jesús Lule Ortega, informó de la suspensión de las casillas especiales y explicó que el cierre de 14 de ellas se debió a la presión y acoso de grupos. Señaló que los efectos de la cancelación de éstas corresponderán al Instituto Tlaxcalteca de Elecciones.
Desde temprano se produjeron las primeras quejas por irregularidades. El dirigente nacional del PRD, Agustín Basave, declaró que en Tlaxcala los candidatos del PRD habían enfrentado una elección de Estado.
El Revolucionario Institucional guardó silencio a lo largo de la jornada. Su candidato Marco Mena se mantuvo oculto, ni siquiera asistió a la conferencia de prensa donde el delegado del PRI nacional, Ramiro Ramos Salinas, lo declaró vencedor de la justa por cinco puntos porcentuales.
Muy temprano, el gobernador Mariano González Zarur fustigó la supuesta intromisión de “personajes de otros estados” en la elección de Tlaxcala. González Zarur declaró que gente ajena a Tlaxcala trata de polarizar a la sociedad.
La mayoría de los municipios donde se suspendió el voto son considerados de riesgo por el INE.
