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De 2010 a la fecha, los líderes más visibles de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), Rubén Núñez Ginez y Francisco Villalobos Ricardez, han devengado entre los dos ingresos superiores a 5 millones 533 mil 933 pesos, de acuerdo con los reportes del Fondo de Aportaciones para la Educación Básica y Normal (Faeb) y el Fondo de Aportaciones para la Nómina y el Gasto Educativo (Fone) de los últimos seis años.
Percibieron estos ingresos a pesar de que durante ese tiempo se han desempeñado como comisionados sindicales y, según los registros de la Secretaría de Educación Pública (SEP), antes de 2013 ninguno de los dos llegó a concursar por sus plazas o a participar en el sistema magisterial (cuando aún existía), el cual otorgaba las promociones, ascensos e incrementos salariales, de acuerdo con una revisión a las bases de datos del Fone de 2015 y 2016, y a los portales de cumplimiento del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) de los años anteriores.
A pesar que desde que entró en vigor la Ley General del Servicio Profesional Docente como parte de la reforma en septiembre de 2013, a partir de ese año, si algún maestro quiere hacer trabajo político, sindical o para la CNTE debe renunciar a su salario de maestro, esto no ocurrió con los dirigentes.
De esta manera, Rubén Núñez Ginez —actual dirigente estatal de la Sección 22 de la coordinadora y uno de los líderes que encabeza la Comisión Nacional Única Negociadora (CNUN) de la gremial— ha percibido 4 millones 81 mil 884 pesos de 2010 a la fecha, gracias a la plaza E7235 como profesor titular C de tiempo completo en la Escuela Normal Experimental Presidente Lázaro Cárdenas, en el municipio Putla Villa de Guerrero. También ha recibido ingresos por el puesto E0463 como profesor foráneo de secundaria técnica en la misma normal.
Sus centros de trabajo son el colegio Presidente Lázaro Cárdenas y las oficinas de la Sección 22 de la CNTE, en el centro de la capital oaxaqueña. Núñez Ginez recibió su segunda plaza (de profesor de secundaria) en octubre de 2012, como “compensación” por haber sido nombrado dirigente de la Sección 22.
El número 2 de la dirigencia magisterial en Oaxaca, Francisco Villalobos Ricardez, secretario general, también se ha visto beneficiado por el cobro de un salario como docente, aunque con un monto menor, al haber recibido entre 2010 y el primer trimestre de 2016 un salario de un millón 452 mil 49 pesos, gracias a su plaza como profesor foráneo de la primaria Justo Sierra, en su natal Santo Domingo Tehuantepec.
En el caso de Francisco Villalobos, también apodado Chico Pelón, tras su ascenso en la estructura sindical (a su llegada a la secretaría general de la Sección 22 en septiembre de 2012, junto con Núñez Ginez) su ingreso económico aumentó a poco más del doble, puesto que de obtener 32 mil 693 pesos en septiembre de ese año pasó a ganar 86 mil 181 pesos al trimestre siguiente, tuvo un aumento salarial de 163%.
El 27 de mayo pasado, EL UNIVERSAL dio a conocer que Núñez Ginez y Villalobos Ricardez cuentan con órdenes de aprehensión vigentes en su contra, giradas por la Procuraduría General de la República (PGR) por orquestar movilizaciones que derivaron en robos, motines, daños en propiedad ajena y contra la riqueza nacional.
Durante el tiempo en que los profesores guiaron y encabezaron las protestas magisteriales por las cuales hoy están en la mira de la PGR, ambos continuaban cobrando sus sueldos como profesores y como comisionados sindicales con plazas.