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francisco.resendiz@eluniversal.com.mx
El presidente Enrique Peña Nieto advirtió que como país, México tiene que acabar con las “inaceptables violaciones a los derechos fundamentales”, que, dijo, atentan contra la dignidad humana y agravian a la sociedad mexicana en su conjunto.
Durante el informe de actividades de la CNDH 2015, el mandatario sostuvo que pese a los avances alcanzados por el país en materia de defensa y promoción de los derechos humanos, “es claro que esta causa es por la que se debe trabajar todos los días”.
Dijo que su gobierno está consciente de que aún falta avanzar para lograr una cultura de absoluto respeto y que las prácticas y protocolos de entidades públicas, particularmente las encargadas de la seguridad pública, obren con absoluta observancia al respeto a los derechos humanos.
En el salón Adolfo López Mateos, de la Residencia Oficial de Los Pinos, consideró que los mexicanos deben seguir esforzándose y avanzando juntos, para que los cambios institucionales se traduzcan en un cambio.
“Sociedad y gobierno debemos trabajar de manera conjunta por un cambio cultural generalizado, en favor de la no discriminación, la inclusión, la legalidad, la tolerancia y el respeto”.
El Presidente afirmó que la CNDH es un organismo fuerte, independiente y confiable, con las facultades y capacidades necesarias para una efectiva protección de los derechos fundamentales en todo el territorio nacional, de la que los mexicanos se sienten orgullosos. Recalcó que tener un ómbudsman fuerte, independiente y eficaz “empodera a la sociedad y fortalece a todo México”.
El Ejecutivo federal enfatizó que el conocimiento y experiencia de sus consejeros y servidores públicos, el compromiso con su misión, la firmeza y el rigor técnico de su actuación convierten a la comisión en uno de los organismos más sólidos en el mundo.
Dijo que así quedó de manifiesto con el informe del presidente de la CNDH, Luis Raúl González Pérez.
Señaló que son más que cifras, pues detrás de ellas hay casos de negligencia o abuso, acciones violatorias de derechos humanos que deben ser atendidas de forma efectiva, pero sobre todo, “que deben ser prevenidas”.
“El gobierno de la República ha sido y seguirá siendo absolutamente respetuoso de su importante función social. Hemos aceptado todas las recomendaciones que ha emitido la CNDH y, desde luego, trabajamos para su efectivo cumplimiento”, dijo.
Peña Nieto subrayó que su administración tiene un firme compromiso con la transformación legal, institucional y, sobre todo, cultural del país, en favor de los derechos humanos y con un enfoque de corresponsabilidad.
El Presidente esbozó seis avances alcanzados, “con la participación de autoridades, organismos autónomos, organizaciones de la sociedad civil, académicos, expertos y la ciudadanía en su conjunto, hemos logrado avances en diversos frentes”. Dijo que se ha logrado la ampliación del catálogo de derechos reconocidos en el marco jurídico del país, como el de recibir una educación de calidad o el del acceso a las tecnologías de la información y la comunicación, además de que se ha consolidado una política de seguridad con mejores estándares de protección y respeto a los derechos humanos.
“Reflejo de ello es que las recomendaciones de la CNDH, particularmente dirigidas a las fuerzas y autoridades federales en este sector, se han reducido año tras año, al pasar de 31, en 2012, a ocho, en 2015. En tres años, se redujo 74% el número de recomendaciones.
“Conscientes, sin embargo, de que aún nos falta seguir avanzando en lograr que esta cultura de absoluto respeto y las prácticas y protocolos que siguen las entidades públicas, particularmente encargadas de la seguridad pública, obren con absoluta observancia a estos principios”, aceptó.
Como tercer avance señaló que se ha incorporado el enfoque de derechos humanos en todas las políticas públicas; como cuarto, que se han fortalecido las capacidades institucionales para salvaguardar los derechos y brindar apoyo integral a grupos en situación de vulnerabilidad.
Como quinto avance señaló la implementación del nuevo Sistema de Justicia Penal, vigente a partir de junio próximo en el país, ya que fortalecerá el debido proceso y resguardará el principio de presunción de inocencia, agilizará los juicios y reducirá la impunidad; finalmente, como sexto avance, destacó el impulso a leyes para combatir con mayor eficacia la desaparición forzada de personas y la tortura.
