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La Contraloría General del Instituto Nacional Electoral (INE) advierte que éste enfrenta un desorden en su organización y crecimiento, con el argumento de las nuevas atribuciones que le otorgó la reforma electoral de 2014.
En el Informe Previo de Gestión 2015, relativo al primer semestre de este año y que será presentado al Consejo del INE este viernes, la contraloría reporta crecimiento “desproporcionado” de las dimensiones y del gasto del organismo.
La estructura ocupacional es “el principal elemento de presión del gasto y constituye el mayor obstáculo para reducir el presupuesto del INE”, según el documento preparado por el contralor Gregorio Guerrero.
Por eso, plantea a los consejeros la necesidad de contener el crecimiento de plazas que se registra cada año postelectoral, anteponer la capacidad a las “filias y afectos” para mantener al personal, amén de atender el fenómeno de los subejercicios.
“La desorganización del crecimiento institucional, así como la dificultad para contenerlo, son un problema de la mayor gravedad operativa y presupuestal. Bajo ninguna lógica resulta admisible que se pretenda con el discurso de la reforma electoral y las nuevas atribuciones soslayar dicha situación.
“Permanecer en esta inercia de no hacer nada o peor aún, convertirla en patente de corso que permita continuar desproporcionando las dimensiones y el gasto del INE ante las muchísimas necesidades nacionales”, no es admisible advierte.
Mañana, el Consejo General del INE aprobará su proyecto de presupuesto 2016 con un monto de 15 mil 473 millones de pesos, que considera racional y austero.
Sin embargo, en el documento de la Contraloría se indica que si bien las nuevas atribuciones exigen la incorporación de estructura para las áreas de reciente creación, eso “no debe impedir que se corrijan las duplicidades, evalúen las cargas de trabajo, identifiquen las tareas estacionales y se simplifique el tabulador de puestos”.
Tampoco debe impedir que “se antepongan criterios de capacidad y habilidades a la antigüedad, filias y afectos” en la permanencia de plazas y que se fusionen departamentos.
Aunque el anteproyecto de presupuesto del INE indica que el capítulo 1000 de sueldos y percepciones apenas se incrementará en 0.3 % con relación al año en curso, la Contraloría plantea terminar la práctica del Instituto que “sistemáticamente acumula algunas de las plazas originalmente solicitadas como apoyo para la organización comicial, perpetuándolas en la estructura” fija.
“Resulta pertinente evaluar dicho crecimiento postelectoral, a fin de identificar las áreas de la institución más propensas a este fenómeno” para contenerlo, pues el costo de la estructura ocupacional es el factor que impide reducir el gasto.
La Contraloría informa que hay en investigación cuatro quejas promovidas por el auditor especial de Cumplimiento Financiero de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) por presuntas irregularidades en la administración de recursos humanos, materiales y financieros, atribuibles a personal de la Dirección Ejecutiva de Administración del INE.
También indaga cuatro denuncias promovidas por el director del Registro Federal de Electores por hechos presuntamente irregulares relacionados con la expedición y disposición de credenciales para votar, además, de enero a junio recibió 210 nuevas quejas, denuncias y vistas, incremento de 275% con respecto a 2014.
