“Más allá de toda la locura que supone esto, todo transcurrió bien. No hubo incidentes ni ningún problema”, aseguró un empleado de una de las cuatro farmacias que aceptaron vender cannabis en la ciudad de Montevideo.
“En este primer día nos imaginamos que iba a ser así, mucha gente que vino y mucha gente que llamó a consultar, rastreando en dónde quedaba todavía”, explicó otro.
Lo que aún no está claro es el momento en que se repondrá el stock. En una de las farmacias explicaban que, por ley, el Instituto de Regulación y Control de Cannabis (IRCCA) tiene hasta 15 días para llevar a cabo una nueva entrega.
Sin embargo, la mayoría de los consultados opinaron que la segunda tanda del producto llegaría entre este viernes y el lunes de la próxima semana, “especialmente por ser algo tan novedoso en este momento”, indicó un trabajador.
De las farmacias consultadas en otras provincias del país sólo una reportó que ya no tenía marihuana para venta.
Largas filas. La estampa del día fueron las largas colas desde temprana hora afuera de las farmacias habilitadas para la venta de marihuana, 16 en total en todo Uruguay. A las 8 de la mañana apenas se abrieron las puertas, se registraron las primeras ventas de cannabis para uso recreativo en Montevideo. Horas antes, el IRRCA difundió la lista de todos los locales farmacéuticos que estaban habilitados.
Así, Uruguay se convirtió ayer en el primer país en el mundo en legalizar totalmente la producción y la venta de marihuana para uso recreacional.
Según pudo comprobar El País en algunos locales, la compra se demoraba en alrededor de cinco minutos, aunque hubo personas a las que les tomó más tiempo por dificultades debido a que las máquinas lectoras de huellas registraron algunos problemas o porque directamente no identificaban su identidad.
Para comprar marihuana es necesario ser ciudadano uruguayo o ser residente legal en el país, además de estar inscrito en un padrón en las oficinas del Correo Uruguay en el cual se debe registrar la huella dactilar, la cual se debe comprobar como requisito para adquirir la hierba.
Quedan fuera los turistas extranjeros, los 6 mil 948 autocultivadores registrados o los miembros de algunos de los 63 clubes de producción de marihuana que operan en el país.
Varias de las primeras personas que compraron marihuana ayer lo hicieron en dosis de 10 gramos, esto es, adquirieron dos paquetes de 5 gramos, que es la dosis máxima de venta para una semana, con un costo de 6.5 dólares por paquete (alrededor de 112 pesos mexicanos). La venta máxima por mes es de 40 gramos.
Javier, de 35 años, fue uno de los primeros en comprar. Al salir del local, en seguida se armó el cigarro y tras fumar dijo a El País: “De gusto, está bien; ahora veré si pega”.
El ex presidente José Mujica, promotor de la norma, dijo ayer a un canal local de televisión que “no hay que tener prejuicios. Uruguay está ensayando un camino”.
“No existe ninguna adicción que sea buena [pero] me parece horrible tener condenada una planta maravillosa”, sentenció el ex mandatario (2010-2015), quien fue el que promulgó la ley para legalizar la marihuana en el país.
Cecilia Escobar, empleada de la farmacia Pitágoras, dijo sobre las 8:30 de la mañana que en menos de media hora ya habían atendido a tres compradores. Pasado el mediodía, ya no tenían más disponible: los clientes compraron toda la marihuana que tenía el local en stock.