Un año y dos meses después de la visita en marzo del año pasado a La Habana del entonces presidente de Estados Unidos, Barack Obama, el número de prisioneros políticos en Cuba aumentó de 93 en abril de 2016 a 140 en abril de 2017, denunció la Comisión Cubana de Derechos Humanos y de Reconciliación Nacional (CCDHRN).
El recuento, del que EL UNIVERSAL recibió una copia, precisó que ahora “hay al menos 140 condenados o procesados por motivos politicos, internados bajo condicionamientos políticos”.
Advirtió que la cifra no contiene a las miles de personas que permanecen en las 200 prisiones, campos de trabajo y asentamientos penales, muchos de ellos dedicados a la producción de carbón vegetal con destino a la exportación.
La Comisión aseguró que el número de prisioneros políticos se ha duplicado en el último año, al pasar de unos 70 en abril de 2016 a 140 en el mes pasado.
Sin embargo, el dato es contradictorio con una cifra que la Comisión, que funciona en la ilegalidad dentro de Cuba, suministró en un informe del 25 de abril de 2016.
En ese informé aseguró que en ese momento había 93 prisioneros cubanos por motivos políticos o procesados y condenados bajo procedimientos políticamente condicionados, generalmente sin las necesarias garantías procesales.
Consultado por EL UNIVERSAL al respecto, Elizardo Sánchez, vocero y ex presidente de la CCDHRN, admitió que la de hace un año fue una lista que se preparó a raíz de la visita de Obama a Cuba, del 20 al 22 de marzo del año pasado.
“En ella se incluyeron un par de decenas de presos que estaban bajo Licencia Extra-penal y varios que seguían cumpliendo sus condenas en libertad condicional. Ciertamente fue una lista no ordinaria de la CCDHRN. La Lista Parcial oficial debe publicarse en un par de semanas”, explicó el también el disidente y ex prisionero político cubano.
De acuerdo con el documento de abril del año pasado, el grupo de 93 incluyó a 11 cubanos encarcelados desde 2003 y ya ese mes permanecían en sus hogares por haberse dictado precarias ‘Licencias Extra-penales’ en su favor que no cancelan las largas condenas, de hasta 25 años, que les fueron impuestas y que siguen vigentes.
Durante la visita de Obama, el presidente cubano Raúl Castro negó que en Cuba existan prisioneros políticos.
La revolución comunista cubana, que en enero de este año cumplió 58 años, evita referirse a los informes, denuncias y documentos de la disidencia sobre la situación de la isla y alega que esos sectores son mercenarios y contrarrevolucionarios pagados por Estados Unidos para tratar de destrozar los logros socialistas.
Más capturas. La organización disidente aseguró que en abril de 2017 había por lo menos 475 detenciones arbitrarias por motivos políticos, mientras que en marzo anterior, eran 432.
Según la CCDHRN, los arrestos pueden ser temporales y en 2016 se registraron 9 mil 940 detenciones, el mayor número desde 2010. En 2014 se reportaron 8 mil 899.
“También confirmamos por lo menos 11 agresiones físicas, 9 casos de hostigamiento y 2 actos de repudio en abril de 2017”, aseguró.
“En el último año la represión política presenta una evidente mutación, ahora está más extendida a lo largo del país y es más selectiva y menos ruidosa: al tiempo que evita las detenciones políticas, el régimen utiliza, cada vez más, la represión preventiva bajo la forma de amenazas policiales y otras acciones intimidatorias sistemáticas”, relató.
Entre esos actos están “las prohibiciones para viajar dentro de Cuba o al extranjero, los registros domiciliarios, las confiscaciones arbitrarias de materiales, medios de trabajo y dinero, el espionaje y las campañas difamatorias, así como la imposición de multas abusivas y desproporcionadas”, puntualizó.
lsm