El papa Francisco instó hoy a los jóvenes a ser "una respuesta concreta a las necesidades y sufrimientos de la humanidad", según dijo el pontífice durante el Viacrucis que presidió en uno de los actos de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ).


"En esta tarde, queridos jóvenes, el Señor les invita de nuevo a que sean protagonistas de su servicio; quiere hacer de ustedes una respuesta concreta a las necesidades y sufrimientos de la humanidad; quiere que sean un signo de su amor misericordioso para nuestra época", fue el llamamiento del Papa.


Cientos de miles de jóvenes que están participando en la JMJ en la ciudad polaca acudieron a la explanada de Blonia para participar en silencio en el Viacrucis, donde a cada estación se indicaron varias obras de misericordia a las que poder dedicarse.


"Hoy la humanidad necesita hombres y mujeres, y en especial jóvenes como ustedes, que no quieran vivir sus vidas a medias, jóvenes dispuestos a entregar sus vidas para servir generosamente a los hermanos más pobres y débiles", recordó Francisco a los jóvenes.


Para cumplir esta misión, explicó, el Señor "les señala la vía del compromiso personal y del sacrificio de sí mismo: es la vía de la cruz. La vía de la cruz es la vía de la felicidad de seguir a Cristo hasta el final, en las circunstancias a menudo dramáticas de la vida cotidiana".


"La vía de la cruz no es una costumbre masoquista", añadió Francisco.


Y luego les lanzó un desafío: "¿Cómo desean regresar esta noche a sus casas, a sus alojamientos? ¿Cómo desean volver esta noche a encontraros con ustedes mismos?".


"Corresponde a cada uno de ustedes responder al desafío de esta pregunta", les dijo.


Cada estación del Vía Crucis, además de las reflexiones, estaba introducida por un pequeño video en el que se contaba la labor de organizaciones católicas como la de la Comunidad de San Egidio y su ayuda a los refugiados sirios.


Y después jóvenes de varias nacionalidades iban pasándose la cruz de la JMJ en un recorrido por la explanada de Blonia.


En su alocución, Francisco recordó especialmente a los refugiados sirios "que huyeron de la guerra. Los saludamos y acogemos con amor fraternal y simpatía", dijo.


Y es que en la primera de las estaciones los encargados de llevar la cruz junto a otros jóvenes voluntarios de la Comunidad de San Egidio fueron una pareja de sirios cristianos, Rana y Maher, que huyeron de Damasco y que ahora viven en Roma.


Francisco había comenzado su discurso a los jóvenes con una pregunta: "¿Dónde está Dios?".


¿Dónde está Dios, si en el mundo existe el mal, si hay gente que pasa hambre o sed, que no tienen hogar, que huyen, que buscan refugio? ¿Dónde está Dios cuando las personas inocentes mueren a causa de la violencia, el terrorismo, las guerras?...", se interrogó Jorge Bergoglio.


Reconoció que "hay preguntas para las cuales no hay respuesta humana" porque, explicó, "sólo podemos mirar a Jesús, y preguntarle a él. Y la respuesta de Jesús es ésta: Dios está en ellos, Jesús está en ellos, sufre en ellos", respondió Francisco a sus preguntas.


Francisco llegó a Polonia el pasado miércoles para participar a la JMJ y hoy presidió este Vía Crucis, una de las ceremonias de esta JMJ, mañana vivirá la vigilia y el domingo la misa de clausura.

bga

Google News

Noticias según tus intereses