El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, garantizó hoy su compromiso personal y el de Naciones Unidas para responder con "políticas de tolerancia cero" ante cualquier caso de abuso sexual por parte de cascos azules.
En rueda de prensa en Estocolmo junto al primer ministro sueco, Stefan Löfven, Ban fue preguntado por el tratamiento que recibió el ciudadano sueco Anders Kompass, empleado de la ONU en Ginebra y sancionado administrativamente por informar a Francia sobre supuestos abusos sexuales a niños cometidos por soldados franceses en la República Centroafricana.
Ban eludió referirse a Kompass y recordó que fue él quien tomó la decisión de crear una comisión independiente para estudiar las acusaciones de abusos y adoptar las medidas necesarias para acabar con esas prácticas.
El secretario general de la ONU pidió "perdón" ante las "continuas acusaciones" y aseguró que una sola ya es algo "demasiado importante, demasiado serio".
"Cualquier acusación que llegue nos aseguraremos de que sea investigada", garantizó antes de prometer también que se apoyará a las víctimas de los abusos y a sus familiares.
El pasado 11 de marzo el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó su primera resolución para responder a los repetidos abusos sexuales cometidos por "cascos azules", respaldando la decisión de repatriar a unidades reincidentes o que no respondan adecuadamente a las acusaciones.
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