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Al percatarse del maltrato que sufrían decenas de caballos y burros, un ciudadano pidió ayuda a través del botón de auxilio que conecta al C2. El denunciante explicó que el ilícito se cometía en un tractocamión rojo aparcado en la esquina del Eje 6 Sur y calle La Cruz, en el Barrio de San Isidro, delegación Iztapalapa, luego de unos minutos el apoyo llegó.
Elementos de la Policía Auxiliar, adscritos a la delegación Iztapalapa, revisaron el vehículo de carga, placas 581 WH8 de la caja y 454 AM1 del tractor, ambas del estado de México.
Dentro encontraron caballos y burros, la mayoría ya sin vida. Los seis sujetos que estaban en el tráiler confesaron que originalmente transportaban a 36 ejemplares de ambas especies.
Según información brindada por la delegación Iztapalapa, los detenidos indicaron que cada lunes venían del estado de México y se instalaban en las inmediaciones del Eje 6 Sur, donde se dedicaban a matar y destazar a los cuadrúpedos. La carne la comercializaban en la Central de Abastos, en la Merced y en rastro de San Vicente Chicoloapan, así como a algunos transeúntes.
Agregaron que salieron del municipio de Almoloya de Juárez y se dirigían al rastro de San Vicente Chicoloapan, pero no explicaron por qué se detuvieron en el Eje 6 para matar y destazar clandestinamente a los animales.
Bajo estos argumentos, los policías auxiliares arrestaron a Fabián Colín Gómez, de 20 años, Mauricio Daniel García Gómez, de 21 años, Víctor Berdin Alférez, de 34 años, Joan Enrrique San Juan Berdín, de 26 años, Felipe Peralta González, de 50 años, y Pedro Berdín Alférez, de 42 años.
Tras leerles sus derechos, los sujetos fueron puestos a disposición del Ministerio Público de la Coordinación Territorial de Seguridad Pública y Procuración de Justicia Iztapalapa Ocho (IZP-8), junto con los animales que aún estaban vivos y la carne.
El Código Penal para la Ciudad de México, en su capítulo sobre “Delitos cometidos contra animales no humanos”, establece que las personas que provoquen la muerte de cualquier animal serán acreedoras a una sanción de dos a cuatro años de prisión, por cada animal, y de 200 a 400 días de multa.
msl
