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“Rubén nunca me comentó que lo hayan perseguido”, aseguró Antonio Contreras en su última declaración ministerial realizada el pasado 14 de agosto sobre el quíntuple asesinato cometido el 31 de julio en un departamento de la colonia Narvarte.
“No sé por qué se haya regresado [de Veracruz], porque él jamás me comentó nada, de hecho nunca me dijo que lo hayan perseguido, pues inclusive yo no me expondría a salir con él, agregando que el día que lo vi por última vez, lo vi tranquilo, un poco desesperado por estar desempleado, pero fuera de eso, no se veía con miedo, ni que cuando camináramos volteara para todos lados”, asentó en la averiguación previa FBJ/BJ-1/T2/04379/15-07D01.
En su declaración, Antonio Contreras explica con detalle los lugares en donde él y (el fotorreportero) Rubén (Espinosa) estuvieron la tarde noche del 30 de julio y la madrugada del 31, antes de llegar al departamento de la colonia Narvarte. Dice que Rubén fue quien sugirió que fueran a un bar del Centro, ubicado en la calle República de Cuba, de nombre La Cueva Colomba, para reunirse con su amiga Nadia Vera.
“Pasaron 40 minutos en lo que llegó la amiga de Rubén, quien llegó sola y en ese momento fue que la presentó diciéndome que era Nadia. Estuvimos ahí bebiendo y platicando, pero muy poco, porque con la música no se entiende mucho, estuvimos ahí hasta como a las 02:00 horas, en que ya nos informaron que iban a cerrar el lugar.
“Cuando salimos, Nadia ofreció su departamento para seguir conviviendo, nos comentó que vivía con dos roomies, pero que no había problema porque cada quien tenía su cuarto, es así que abordamos un taxi frente al bar e hicimos parada en un Oxxo ubicado en Luz Saviñón”, indicó.
Ante la pregunta del Ministerio Público sobre si sabía que Rubén había recibido amenazas antes, durante y después de su estancia en el estado de Veracruz, Antonio aseguró que nunca le comentó nada. También dijo desconocer si el fotoperiodista conocía el departamento de Nadia.
“No lo sé, pero yo creo que no, por sus actitudes, pues cuando íbamos por el camino jamás hizo un comentario respecto al departamento y en mi caso personal sí fue la primera vez que me presenté a ese departamento. Cuando llegamos no vimos a nadie en la sala, ni en la cocina, porque los cuartos estaban con la puerta cerrada, y directamente ingresamos al cuarto de Nadia y al entrar vimos el lugar pequeño, sólo tenía espacio para una cama, tenía cosas regadas en el piso como libros, estuches, cargadores”.
“Reitero que ninguno de los dos —ni Nadia, ni Rubén— se veían tensos, con temor o que hayan recibido amenazas porque, hasta donde tengo entendido, se conocieron en Veracruz, pero en ningún momento platicaron de su activismo y lo entiendo porque yo cuando conozco a alguien no le platico mi vida”, aseguró.
En esta declaración, Antonio Contreras refiere que no vio a las chicas con las que vivía Nadia, sólo que cuando ya se iba del departamento en la mañana alcanzó a ver una habitación abierta y al interior estaba una joven de cabello rizado, oscuro, con ropa oscura y ni siquiera la pudo saludar porque cerró, “por lo que puedo asegurar, que en lo que a mí respecta, yo no vi a nadie más del departamento, salvo a Nadia”.
Ante las versiones sobre si habían consumido algún tipo de droga esa noche, Antonio aseguró que no. En la habitación de Nadia, sólo había mariguana, pero nadie la fumó.