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El 71% de la ejecución de obra pública en la Ciudad de México incumple con las especificaciones de construcción y normas de calidad de los materiales y equipos. Debido a la falta de supervisión y control en las obras, la Contraloría General capitalina creó el Laboratorio de Revisión de Obra Pública, con un presupuesto de 43 millones de pesos.
El objetivo es transparentar la ejecución de obra pública de la ciudad, a través de la realización de más de 30 pruebas para verificar la calidad de concretos, asfalto, terracería, mampostería y aceros.
El laboratorio realizará pruebas técnicas a obras que representan una inversión pública de más de 21 mil 631 millones de pesos en este año en la CDMX; se busca prevenir que se realice con materiales de mala calidad.
A dos meses de su operación, el Laboratorio de Revisión ha verificado dos obras públicas importantes para el gobierno capitalino: el tercer tramo del Tren Interurbano México-Toluca y el desnivel Mixcoac-Insurgentes, próximo a ser inaugurado.
Los primeros resultados del área han sido positivos, pues se comprobó que el acero de refuerzo o varillas utilizadas en ambas obras son de alta resistencia.
No obstante, se detectaron grietas en la zona de rodamiento del desnivel Mixcoac, las cuales ya fueron reparadas por las empresas constructoras de esta infraestructura.
En ambos casos, faltan realizar levantamientos topográficos de trazo, análisis de concretos y soldaduras.
Personal del laboratorio ya solicitó información de la ampliación de la Línea 12 del Metro a Observatorio, pues harán revisiones al proyecto ejecutivo.
Conforme avancen los trabajos, los verificadores ingresarán a la obra para analizar el proceso constructivo. La revisión dará inicio en cuanto haya avances en materia de colocación de aceros y concreto en Línea 12.
Lo mismo sucederá con la Línea 7 de Metrobús, que corre por Paseo de la Reforma.
En entrevista con EL UNIVERSAL, el ingeniero Francisco González Ortega, director del Laboratorio de Revisión, explicó que desde la Contraloría General se da seguimiento puntual a cada obra, desde la cimentación hasta la colocación de trabes y columnas; así como la realización de los trabajos conforme a los proyectos planteados.
“Nuestro trabajo es 100% preventivo, si encontramos algo que no está hecho de manera correcta solicitamos la reparación; si hay algún elemento que no está cumpliendo o retiras el lote o reparas, vuelves a colar o vuelves a corregir el trabajo. Esa es nuestra función, para que se garantice que se están utilizando los materiales y los procedimientos constructivos correctos de acuerdo a lo establecido en las normas”.
Deficiencia en obras
El año pasado, la Contraloría General realizó diversas verificaciones a las dependencias del Gobierno Central y detectó 129 obras con irregularidades; en 2015 fueron 151.
Las deficiencias encontradas fueron: plazos incumplidos; entrega extemporánea del anticipos; retraso de formalización de convenios modificatorios; recepción inoportuna de los trabajos; tardía realización de las pruebas de operación y puesta en marcha de los mismos; ausencia de supervisión; deficiente control de obra, que se traduce en mala calidad o trabajos incompletos; así como problemas técnicos por incumplimiento de especificaciones de construcción y normas de calidad.
El proceso
Verificadores del Laboratorio de Revisión de Obra Pública toma muestras de concreto hidráulico, mezclas asfálticas, terracería, soldaduras y acero de las construcciones, y los someten a diversas pruebas de temperatura y resistencia para conocer la calidad de dichos materiales.
Durante un recorrido en las instalaciones del laboratorio, que se ubica en la zona de El Rosario, en la delegación Azcapotzalco, se observó la prueba de resistencia a una varilla del Tren Interurbano. El elemento fue colocado en un aparato que ejerció fuerza de compresión hasta romperlo por la mitad. De acuerdo con los resultados que arrojó la computadora, la varilla aprobó la prueba de resistencia y se concluyó que es de buena calidad.
A pesar de que el laboratorio ya comenzó a operar, tendrá que someterse a un procedimiento de acreditación ante la Entidad Mexicana de Acreditación A.C., la cual reconoce la competencia técnica y confiabilidad de laboratorios de ensayo, calibración, clínicos, unidades de verificación (organismos de inspección), y organismos de certificación.
“No se va a permitir que se entregue un trabajo mal hecho […] Lo importante es decir: Yo no te contraté para esto, contraté para un trabajo bien hecho, bien ejecutado. Eso es lo que estamos cuidando, que la ciudadanía cuente con una buena infraestructura, y si algo hay que quitarlo, hay que repararlo, hay que demolerlo, se tendrá que hacer”, puntualizó el director del área, Francisco González Ortega.