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diana.fuentes@eluniversal.com.mx
“Que tenga la atención de recibirnos y valore cada uno de los resultados” es lo que pedirán hoy vecinos de la Cuauhtémoc al delegado Ricardo Monreal Ávila, luego de que por un mínimo de 0.5% la gente consideró que ya no debe seguir gobernando la demarcación.
Después de que Monreal Ávila señalara la probabilidad de que en septiembre próximo deje la Jefatura Delegacional para aspirar a la candidatura de Morena rumbo a 2018, los vecinos dijeron que por uno u otro motivo hay coincidencias de que el zacatecano ya no concluirá su administración.
Por ello, a partir de la propuesta de la consulta sobre su revocación de mandato, le recomendaron que ocupe este tiempo —casi tres meses— para poner en regla la Cuauhtémoc.
Desde la Asamblea Legislativa, el Comité Promotor de la Consulta Ciudadana dio a conocer los resultados de este ejercicio.
De un universo de poco más de 14 mil votantes, 7 mil 124 dijeron sí a que Monreal Ávila continúe gobernando, mientras que 7 mil 392 opinó que debería dejar el cargo.
Con los resultados obtenidos en la consulta de este domingo, se aprecia una división entre vecinos de la colonia Centro, pues mientras 469 habitantes de la zona del metro Allende —donde se concentra la mayoría de comerciantes— votaron porque Monreal permanezca en el cargo, 413 que circundan Fray Fernando Teresa de Mier emitieron un “no”.
Armando Contreras, miembro del Comité Promotor, aseguró que durante el proceso de la consulta participó gente de la delegación.
“La mitad de los que estábamos en la mesa contando eran del Comité Promotor y la mitad de la compañera que apreciamos mucho Diana Sánchez Barrios, ellos estuvieron viendo puntualmente acta por acta”, insistió.
En febrero de este año, Ricardo Monreal acudió a la sede del Instituto Electoral local a presentar una solicitud formal para iniciar el procedimiento de revocación de mandato.
El consejero del órgano electoral local, Carlos González, dijo en su momento que no se podía dar trámite a la petición del delegado de someter a votación vecinal su permanencia o no en el cargo, ya que la figura de revocación de mandato no existía en la Ley de Participación Ciudadana.
El político zacatecano indicó que no tenía temor de irse, que era un riesgo si la gente así lo decidía, pero aún así había que someterse a ellos.
“Halago en boca propia es vituperio, es un asunto de trabajo político, de revisión de delegados y de compromisos”, argumentó Monreal.
La diputada perredista Francis Pirín, quien financió económicamente la consulta, destacó que fue un ejercicio democrático en donde se demostró que los ciudadanos son capaces de organizar consultas por sí mismos.
“Los gobernantes deben tomar en cuenta los resultados, pues allí se externa el verdadero sentir de la gente, la inconformidad ante su labor o, en dado caso, hasta su beneplácito”, refirió.
Además, comparó la capacidad de los habitantes para la organización de esta consulta, pues “con muy pocos recursos hicieron lo que el Instituto Electoral local no quiso hacer. Finalmente ganaron los ciudadanos y creo que es algo que se tendría que replicar no nada más en la Ciudad, sino a lo largo y ancho del país”.
