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diana.fuentes@eluniversal.com.mx
Por primera vez, Ricardo Monreal Ávila, jefe delegacional en Cuauhtémoc, descarta el apoyo del líder de Morena, Andrés Manuel López Obrador, rumbo al proceso electoral de 2018.
Asegura que es su amigo y siempre ha sido respetuoso de las decisiones de la gente, de su militancia y de los actores políticos que están a su alrededor.
A 14 meses de distancia de gobernar la delegación más emblemática de la Ciudad de México, Monreal admite que sus declaraciones de no confrontación con el jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera, le han generado problemas dentro de su mismo partido. Pese a esto, advierte que ha actuado con sinceridad y que desde su llegada a la Cuauhtémoc aclaró que no se enfrentaría con el mandatario local y lo ha intentado.
Sentado en su oficina, no en sillas de plástico como hace un año sino con mobiliario prestado por dos empresarios de la Zona Rosa —silla y sillón negro de piel—, el político zacatecano habla del método de elección que hará Morena para elegir a su candidato para la jefatura de gobierno.
Sin más, señala que leyó, de parte del presidente del partido, Martí Batres, que la designación será a través de una consulta y no una encuesta. “No hay problema, el método que quiera y los que deseen inscribirse tienen libertad en la Ciudad”.
Dice que la capital atraviesa un momento de polarización, de una rebeldía ciudadana, de una ebullición cívica y que resulta impostergable firmar un nuevo acuerdo social que no es más que una amplia alianza de izquierda que, en ocasiones, no es entendida por los extremos radicales de los partidos.
Ahí, frente al Santo Niño de Atocha, imagen que ya se volvió costumbre lo acompañe en su trabajo como jefe delegacional, Ricardo Monreal avisora que en el futuro la capital no podrá ser gobernada con una visión única desde una fracción o visión hegemónica. La ha gobernado la izquierda en los últimos 20 años y por eso asegura que es momento de hacer adecuaciones para que la izquierda pueda seguir en el poder.
“La ciudad no puede seguir gobernando con clientelas electorales establecidas, sino con mayor participación ciudadana que, por cierto, ya tiene y mucha”.
¿Un reto enorme, no?
—No hay adversario liquidado, en política nadie está muerto. Se toman decisiones y afectas a una minoría o una mayoría, por eso es que se debe señalar con contundencia que en el ejercicio de gobierno la toma de decisiones te desgasta, pero hay que asumir. La comodidad no va con el ejercicio del buen gobierno. La credibilidad de los políticos está por los suelos.
Luchar por ganar la Ciudad de México es un reto enorme, pero hay que hablar con la verdad y decir que se tiene que resolver problemas de inseguridad y movilidad.
¿Con Morena hasta el final?
—Sí, tenemos muy claro que Morena va a ganar la Ciudad y que Morena va a ganar la Presidencia de la República, pero lo más importante para mí, de verdad se lo digo, es contribuir a que Andrés Manuel sea Presidente de la República. Incluso más que mi posición personal de ser jefe de gobierno, por eso planteo un acuerdo con Mancera, aunque esté de por medio una posición personal mía.
Podría explicar eso, por favor
—Un acuerdo con Mancera implica también que la Ciudad pueda establecer nuevos equilibrios políticos y en estos equilibrios puedo perder, pero eso no importa, lo que importa es que Andrés Manuel sea el Presidente.
¿Aunque lo dejen fuera a usted?
—No importa, no es una ambición personal, no es una ambición vulgar, es lograr un proyecto para la transformación del país, aunque lleve de por medio el que no estés en esa posición.
¿Se la está jugando?
—Yo me la estoy jugando abiertamente y no voy a traicionar los principios ni de Morena ni dejar de avanzar.
¿Oiga, pero quizá Andrés Manuel no vea bien ese acuerdo entre Mancera y usted?
—No, yo creo que sí, los vamos a necesitar a todos. Soy de la idea de que las izquierdas deberían estar unidas para 2018, creo que lo necesitamos, todos lo necesitamos para poder ganar la Presidencia. Andrés por si solo puede ganarla, ya las encuestas lo colocan en un primer lugar, pero garantizaríamos que caminaremos juntos.
Pero a Mancera ni si quiera lo contemplaron en la reunión de gobernadores del PRD
—Sí, eso es cierto, pero digo que se equivocan los del PRD, incluso con respeto a los gobernadores del sol azteca, el activo más importante que tienen se llama Miguel Ángel Mancera y si lo picotean y lo excluyen, eso se llama en política un error. No se pueden dar el lujo de escatimar o excluir a figuras públicas exitosas.